Cualquiera de las generaciones anteriores del Mazda MX-5 sigue despertando pasiones, prueba de ello es el precio que tienen las unidades de segunda mano, sean del año que sean, pero también la cantidad de accesorios y preparaciones que siguen surgiendo para ellos. Es el caso del último proyecto del preparador británico BBR, que ya acumula experiencia en el mundo Miata y ahora ha recurrido a un compresor para potenciar el Mazda MX-5 NC, es decir, el de tercera generación.
Y se trata precisamente de una ligera mejora, sino de una preparación con mayúsculas porque consigue llevar al Mazda MX-5 hasta los 300 CV y 308 Nm de par máximo, ya sea en su versión 1.8 de 126 CV o en el 2.0 de 160 CV, ambos atmosféricos de origen y con un peso inferior a los 1.200 kg. Para los que crean que es demasiado, BBR ofrece un nivel de potenciación más suave, el BBR Stage One, con el que el roadster japonés solo llega hasta los 250 CV y 289 Nm de par máximo.
Un año de garantía
Este último tienen un coste de 4.995 libras, es decir, unos 5.990 euros al cambio, y permite al MX-5 acelerar de 0 a 100 km/h en 5,3 segundos. Además del compresor, un C30-94 Rotrex Supercharger, incluye una serie de modificaciones necesarias para digerir la nueva potencia, como manguitos de silicona, una reprogramación electrónica de la centralita, un nuevo intercooler frontal o un sistema de refrigeración optimizado.
La preparación más salvaje, denominada BBR Stage Two, asciende a 5.995 libras, al cambio unos 7.190 euros y tiene garantía de un año. Con este nivel de potenciación, el Mazda MX-5 solo necesita 4,8 segundos para alcanzar los 100 km/h desde parado. Por comparar, el actual Mazda MX-5 en su versión más potente, la 2.0 de 184 CV, acelera de 0 a 100 km/h en 6,8 segundos.
