Los jugadores del videojuego Project Motor Racing podrán ponerse al volante a partir de noviembre del Audi R8 ganador de las 24 Horas de Le Mans, el modelo que más victorias ha otorgado a la marca en este campeonato de resistencia.
El Audi R8 que ganó en 2002 será protagonista de este videojuego a partir del 25 de noviembre, pero antes, del 20 al 24 de agosto, los visitantes de la feria Gamescom de Colonia (Alemania) podrán ver en vivo y en directo este coche de 610 caballos, ya que se exhibirá en el stand de GIANTS Software (Pabellón 6, Stand B061) durante la convención de videojuegos.
Los visitantes podrán ver el coche conducido por el trío ganador (Frank Biela, Tom Kristensen y Emanuele Pirro) en la exhibición en Gamescom prácticamente en su estado original, tal como se encontraba cuando cruzó la línea de meta en la famosa carrera de resistencia, ya que todavía conserva pequeños rayones y suciedad, que reflejan la intensidad de Le Mans.
Al volante del Audi R8 ganador en Le Mans 2002
Además, los visitantes de la Gamescom serán los primeros que pongan a prueba sus habilidades al volante de este Audi R8, gracias a un simulador de conducción con el juego Project Motor Racing. El que consiga la vuelta más rápida en este simulador será coronado como profesional de las carreras y se llevará a casa un premio exclusivo.
Kai Mensing, responsable de licencias en Audi Tradition, ha supervisado las integraciones de los coches de la marca en videojuegos durante más de 25 años y está especialmente entusiasmado con la integración del R8 en el simulador de carreras Project Motor Racing. «El automovilismo siempre ha ejercido una gran fascinación. Poder conducir un coche de carreras histórico en un juego es una experiencia increíble; hace que estos vehículos legendarios se sientan realmente auténticos y vivos», ha explicado.
Audi: 13 victorias en Le Mans
Desde 1923, la carrera de resistencia de Le Mans se ha convertido en un clásico y se considera una de las más desafiantes y prestigiosas del mundo. La marca de los cuatro aros participó por primera vez en las 24 Horas en el año 1999 y el Audi R8R demostró su potencial ganador desde su debut: sus tres terceras y cuartas posiciones en 1999 fueron toda una declaración de intenciones. Desde el año 2000, la marca ha ganado la prueba en 13 ocasiones.
En el año 2000, la marca celebró un espectacular triplete, asegurándose los tres primeros puestos de la clasificación y en 2001, defendió el título. En 2002, regresó a Le Mans parta lograr otro triplete. Pocos fabricantes han logrado ganar Le Mans tres veces seguidas, y la tarde del 16 de junio de 2002, Audi se unió a ese grupo de élite con otra brillante victoria en el podio. Entre los años 2000 y 2005, el R8 ganó en Le Mans en cinco ocasiones, y “Mr. Le Mans”, Tom Kristensen, fue uno de los pilotos componentes del equipo ganador en cada uno de aquellos años.
En 2006, la marca provocó una auténtica revolución tecnológica con el R10 TDI, el primer coche ganador en Le Mans equipado con un motor diésel. Desde entonces, únicamente los vehículos LMP de competición con motores diésel han conseguido ganar la clásica carrera en La Sarthe, incluyendo entre ellos a otros ocho modelos de los cuatro aros.
Desarrollar un motor diésel para competición con más de 650 CV de potencia fue todo un reto y la integración del V12 en una coche de carreras LMP planteó igualmente un gran desafío. El peso, el reparto de las cargas por eje y los requerimientos de la refrigeración en una categoría de alta competición especialmente sensible a la aerodinámica, planteó unas elevadas exigencias a los ingenieros. El Audi R10 TDI ganó Le Mans consecutivamente en tres ocasiones desde 2006.
El Audi R15 TDI, dotado con un motor V10 TDI y una batería de ion-litio para alimentar el sistema eléctrico ganó en 2010 y batió el record de distancia recorrida vigente desde hacía 39 años en La Sarthe. Un año después debutó el R18 TDI, que también fue, al instante, un coche ganador.
El primer híbrido
Desde entonces, todos los coches de carreras Audi LMP1 han recibido la denominación R18, a pesar de que siempre se ha tratado de modelos de nueva generación. El R18 e-tron quattro del 2012, el primer coche de competición híbrido de la marca, significó el mayor paso adelante. Audi, como primer ganador con un vehículo híbrido, marcó un nuevo hito en Le Mans y, en 2013, volvió a ganar de nuevo con una versión significativamente actualizada de este modelo, con un motor V6 TDI que enviaba su potencia al eje trasero, un sistema híbrido al eje delantero, y el sistema de control de todo el conjunto era completamente electrónico.
Un año más tarde, Audi desarrolló básicamente un nuevo modelo aún más eficiente, el R18 e-tron quattro. Ganador de la carrera en 2014, era aún más rápido que su predecesor, aunque utilizaba un 22 por ciento menos de combustible.
