Aunque las rotondas sirven para descongestionar el tráfico, no suelen ser el lugar más seguro por el que podemos circular. Cómo usar correctamente una rotonda siempre es objeto de efusivo debate entre conductores abonados al carril derecho y conductores habituales del carril central. Sacar este tema de conversación puede generar intensas e interminables discusiones.
No sólo hay diversidad de opiniones en cómo usar los carriles, sino también en cuándo activar los intermitentes. Lo malo de esta disparidad de creencias, es que un malentendido en una rotonda puede acabar fácilmente en colisión. Por eso Tráfico identifica siete situaciones de riesgo o peligro en las rotondas y nos indica cómo actuar en cada una de ellas.
La DGT recuerda cómo se debe circular en las rotondas
Lo cierto es que no todos los conductores saben circular correctamente por las rotondas, pero no es de extrañar, dependiendo de la autoescuela en la que hicieras las prácticas te lo pueden haber enseñado de una u otra manera. Por ello la DGT recuerda cada cierto tiempo cuál es la forma correcta de conducir en las glorietas.
La norma general establece que se debe acceder a la rotonda por el carril derecho, siempre que esté libre y sea posible. Aunque la DGT recuerda que hay una excepción a esta norma: se podrá acceder directamente al carril izquierdo de la rotonda si el carril derecho está congestionado, siempre y cuando vayamos a tomar una de las últimas salidas, para que de tiempo a cambiarse de carril antes de salir de la glorieta. Lo que trae a colación la norma más ignorada de las rotondas y que más accidentes provoca: no se pude salir directamente desde el carril izquierdo. Te contamos más a continuación.
