Las ZBE (zonas de bajas emisiones)en funcionamiento desde primeros de año se están convirtiendo en la clave de posibles atascos administrativos, debido a la catarata de sanciones que se están imponiendo, y que por presentar defectos de forma están generando los correspondientes recursos de descargo.
El derecho y reglamento sancionador exige que la sanción debe cumplir unos requisitos para ser legalmente admitida, cualquier defecto en su forma y contenido es susceptible de que la convierta en una multa anulada por la administración o los tribunales.
4Multado por circular muchas veces

Y por otro lado, esta la denuncia continuada. La ley estima que es suficiente una sola denuncia para un actividad reiterativa en este sentido, tal y como establece el artículo 63.3 de la Ley 39/2015 de Procedimiento Administrativo Común de las Administraciones Públicas y que explica con claridad que en estos casos se trata de una única infracción continuada en el tiempo que debe tratarse como una única denuncia, evitando así iniciar el mayor número de expedientes sancionadores posibles.
Estas situaciones han derivado en que la multitud de recursos generados, hagan de los despachos de justicia una barricada contra la acción recaudatoria de los ayuntamientos, que tienen en las zonas de bajas emisiones una fuente de ingresos por sanciones muy oportuna, pero quizás desmesurada.