En la votación celebrada esta misma tarde, los eurodiputados han dado el visto bueno definitivo a la nueva normativa Euro7 para reducir las emisiones de turismos, furgonetas, autobuses, camiones y trailers.
Con 297 votos favorables, 190 en contra y 37 abstenciones, el Parlamento Europeo ha aprobado el acuerdo provisional alcanzado junto con el Consejo Europeo el pasado 18 de diciembre sobre las nuevas normas que regulan las emisiones vehiculares en las carreteras europeas.
El nuevo Reglamento para la homologación y la vigilancia del mercado europeo de vehículos de motor (la nueva normativa Euro7) establece los nuevos estándares que todos los vehículos automóviles deberán cumplir durante más tiempo, medida con la que busca lograr que sigan siendo igualmente sostenibles durante toda su vida útil.
Reducir emisiones y aumentar durabilidad de baterías
Para coches y furgonetas, la nueva normativa Euro7 mantiene los límites de emisiones y el proceso de homologación ya vigentes en la actual Euro 6, fijando límites más estrictos de emisiones de escape para autobuses y camiones. Estos se endurecen tanto si son medidos en laboratorio como bajo condiciones de conducción reales, aunque se mantienen las condiciones de homologación establecidas en la normativa Euro6.
Eso sí, por primera vez, los estándares que establece la UE incluyen límites para las partículas emitidas por los frenos (PM10) de coches y furgonetas, así como requisitos mínimos de rendimiento y durabilidad de las baterías para vehículos eléctricos e híbridos.
Euro7 aporta más información para los consumidores
La nueva normativa crea igualmente un nuevo pasaporte medioambiental para los vehículos homologados, en el que se incluirá información sobre la eficiencia ecológica del vehículo en el momento de su registro. Así, por ejemplo, constarán sus límites de emisiones de polución, de emisiones de CO2, sus consumos de carburante y electricidad, su autonomía eléctrica o la durabilidad de la batería, entre otros datos
La nueva normativa también establece que todos los conductores también podrán tener libre acceso a la información actualizada de sus vehículos sobre el consumo de carburante, la salud de la batería, las emisiones contaminantes así como de cualquier otra información pertinente que sea recogida por los sistemas de monitoreo del propio vehículo.
Según el ponente de la Comisión de Medio Ambiente, el eurodiputado checo Alexandr Vondra ha señalado tras la votación, “hemos conseguido un equilibrio entre los objetivos medioambientales y los intereses de los fabricantes. Con la nueva normativa queremos asegurar la asequibilidad de los utilitarios nuevos con motor de combustión, al tiempo que ayudamos a la industria automovilística a prepararse para la previsible transformación de su sector. Ahora la UE también tendrá en cuenta las emisiones de frenos y llantas, y también asegurará una mayor durabilidad de las baterías».
Lo que el Parlamento Europeo a hecho con esta votación ha sido ratificar las decisiones al respecto que se han venido adoptando desde que el 10 de noviembre de 2022 la Comisión Europea propusiera regular unos estándares más estrictos en materia de emisiones de contaminantes atmosféricos de los vehículos a motor independientemente del carburante que estos utilicen. Actualmente, los límites que se aplican a coches y furgonetas eran los de la normativa Euro6, mientras que para autobuses, camiones y otros vehículos pesados se venía aplicando la EuroVI.
Según informa el departamento de comunicación del Parlamento Europeo , “al adoptar este informe, el Parlamento responde a las expectativas ciudadanas de promover la compra de vehículos eléctricos con elevados estándares de vida útil de las baterías, de avanzar en el despliegue de una infraestructura digital y eléctrica y de reducir la dependencia energética de la UE de actores extranjeros, como se expresó en las propuestas 4(3), 4(6), 18(2) y 31(3) de las conclusiones de la Conferencia sobre el Futuro de Europa. “
De esta manera, para que la nueva normativa Euro7 entre definitivamente en vigor ya sólo queda un único paso por cumplir en todo el proceso regulador, que es la aprobación por parte del Consejo Europeo del nuevo Reglamento Euro7.
