Por norma general las reediciones de legendarios vehículos suelen convertirse en los niños mimados de la casa. Hasta el punto de que en raras ocasiones acaban pisando la calle. Eso no ha ocurrido con este sensacional Bizzarrini 5300 GT Corsa, una maravilla de la ingeniería de la que tan solo se van a ensamblar 24 unidades. Y la primera ha pasado por la pista de pruebas de Top Gear y por las manos de The Stig.
Este extraordinario Bizzarrini 5300 GT Corsa está inspirada en la unidad con el número de chasis #0222 que acabó en primera posición de su clase en las 24 Horas de Le Mans allá por el año 1965. De aquella criatura hasta hereda el color de su carrocería, llamado Rosso Corse Bizzarrini 222, el cual estará aplicado en las 24 unidades que esta artesanal empresa italiana pretende fabricar en la actualidad de semejante deportivo.
Inspirado en el Bizzarrini que ganó Le Mans en 1965
De su antepasado este Bizzarrini 5300 GT Corsa hereda todo su ADN, porque tan solo se han efectuado una serie de actualizaciones para cumplir con la normativa actual de la FIA para disputar carreras de vehículos históricos. Entre esas mejoras se encuentra un depósito de carburante específico, una jaula de seguridad, arneses de seis puntos… Pero por lo demás, las sensaciones que transmite conducirlo serán calcadas a las que tuvieron Regis Fraissinet y Jean de Mortemar en esa histórica victoria hace ya 57 años.
A 0,3 segundos de un moderno Ford Mustang GT
Esta criatura esconde un corazón 5.3 V8 con carburadores DCOE que le permite generar un total de 406 CV de potencia, los cuales deben mover solo 1.230 kilos. Y a pesar de que este Bizzarrini 5300 GT Corsa emplea tecnología con casi 60 años de historia, sus prestaciones sorprenden. Cierto es que los chicos de Top Gear tenían claro que no sería el coche más rápido en pasar por su circuito, pero esta criatura ha parado el crono en 1 minuto y 28,3 segundos, lo que le hace ser tres décimas más lento que un Ford Mustang GT.
Ahora bien, este Bizzarrini 5300 GT Corsa es considerablemente más caro que el ‘pony car’ de la firma del óvalo azul. Y es que cada unidad se vende por 1,65 millones de libras, que es el equivalente a 1.890.000 euros al cambio actual. Impuestos aparte.