Madrid está a punto de vivir uno de los cambios más profundos en su forma de entender el coche privado y el uso del espacio público. El fin del aparcamiento gratuito en superficie, una realidad que ya se ha ido imponiendo poco a poco en distritos céntricos, dará un salto definitivo a partir de 2026. Lo que durante años fue una excepción en muchos barrios pasará a convertirse en norma, transformando la rutina diaria de miles de conductores madrileños.
En este artículo, un técnico municipal de movilidad aporta su punto de vista sobre la nueva ordenanza. ¿Su mensaje? No se trata solo de poner más parquímetros, sino de redibujar el mapa urbano de Madrid, equilibrar el uso del coche y devolver protagonismo a los residentes. Y aunque el calendario parece lejano, los primeros efectos se notarán bastante antes de lo que muchos imagen.
3Menos margen para aparcar gratis
Uno de los aspectos que más inquieta a los conductores es la posible ampliación de los horarios del SER. Y aquí, según el técnico municipal, hay que desterrar la idea de una aplicación automática. “No todas las zonas tendrán el mismo horario, pero sí existirá la posibilidad de adaptarlo a la realidad de cada barrio”, aclara.
En áreas con alta actividad comercial, turística o cultural, los parquímetros podrían funcionar más allá de las 21:00 horas, incluir las tardes de los sábados e incluso domingos y festivos. El mensaje de fondo es claro: el aparcamiento en superficie deja de ser un recurso ilimitado y pasa a gestionarse como un bien escaso, priorizando al residente frente al uso intensivo del vehículo privado.








