La llegada del Hyundai Ioniq 6 reactiva el interés por las siluetas de corte sedán -aunque con filosofías diferentes- para los eléctricos. Porque los fabricantes parece que se habían lanzado únicamente a desarrollar carrocerías SUV, menos eficientes, para la nueva movilidad eléctrica.
Tesla Model 3
La referencia entre los sedán eléctricos es sin duda el modelo de la marca americana. Sus dimensiones son algo menores que las del Hyundai Ioniq 6: 4,69 metros de longitud, 1,84 de ancho y 1,44 de altura. Su distancia entre ejes de 2,87 metros procura una buena habitabilidad interior y un maletero de 425 litros detrás y un cofre delantero de 117 litros.
Pero los rasgos más diferenciadores del Tesla están en la parte de propulsión, con tres alternativas. Para empezar, ofrece 283 caballos, con una batería de 60 kWh que garantizan 491 kilómetros. Su precio, 46.000 euros. En el centro de la gama una variante de 351 caballos con doble motor y tracción total y batería de 75 kWh con la que alcanza los 602 kilómetros de autonomía. Su precio es de 52.000 euros. Y finalmente, con doble motor, tracción total la versión de 462 caballos y 75 kWh de batería homologa 547 kilómetros de autonomía. Y su precio roza los 60.000 euros.
