Cada año, el programa Performance Innovation de la firma nipona rompe una hucha para rescatar legendarios vehículos que han marcado una época. El último en ser devuelto a la vida ha sido este legendario Nissan Patrol, que disputó el Paris-Dakar en el año 1987.
Con un motor 2.8 Turbodiésel
En realidad, en aquel año se inscribieron dos ejemplares de Nissan Patrol equipados con el propulsor 2.8 Turbodiésel de cuatro cilindros. Eran dos de los 312 vehículos que disputaron aquel duro rally que recorría Europa, Argelia, Niger, Malí, Mauritania y Senegal a lo largo de 13.000 kilómetros. Los dos Nissan Patrol recibieron los dorsales 211 y 212, y contaban con esta incofundible decoración «Fanta limón».
El vehículo #211 estaba pilotado por Miguel Prieto y su copiloto era Ramón Termens, mientras que el #212 era tripulado por los hermanos Jorge y Hansi Babler. Este último se vio obligado a retirarse en la segunda etapa, pero el primero aguantó hasta el final y se convirtió en el primer vehículo con mecánica diésel en finalizar el Rally Paris-Dakar. Además lo hizo en una meritoria novena posición de la general.
Después de cumplir su función, el Nissan Patrol #211 fue adquirido por Salvador Claret para formar parte de su colección privada. Allí ha permanecido cerca de tres décadas, pues en 2014 Nissan decidió rescatarlo para restaurarlo por completo. Casi dos años de trabajo han necesitado para devolverlo a la vida y este legendario Patrol volverá a formar parte de la colección Nissan.
