Los automóviles modernos no pueden usar cualquier tipo de cristal para sus ventanas tanto la parte delantera como la luneta. La seguridad de los ocupantes es primordial, y por ello se emplean vidrios laminados y templados. Mientras que el parabrisas de adelante utiliza vidrio laminado, que consta de dos capas de vidrio unidas por una capa de plástico para mayor resistencia, las ventanillas y la luneta trasera están hechas de vidrio templado.
Este material tiene una estructura y proceso de fabricación específicos que, aunque proporcionan seguridad, también pueden producir ciertos efectos visuales como manchas, que no siempre se comprenden bien. El utilizado en la parte trasera de los automóviles, se fabrica mediante un proceso que implica calentarlo a altas temperaturas y luego enfriarlo rápidamente. Este enfriamiento brusco no es uniforme y genera tensiones internas en el vidrio, lo que fortalece el material, pero también puede provocar que la luz se refleje de manera desigual, creando un efecto de manchas o suciedad en la superficie.
La explicación de por qué se generan estas marcas en la luneta
Estas manchas, a menudo percibidas como suciedad, son en realidad un subproducto del proceso de templado del vidrio. Durante el enfriamiento rápido, las tensiones internas se distribuyen de manera desigual, causando que ciertas áreas del vidrio reflejen la luz de forma diferente. Esto se hace más evidente bajo ciertas condiciones de iluminación o cuando se ve desde ciertos ángulos. En 2021, General Motors emitió comunicados a propietarios de algunos de sus modelos para explicar que estas manchas no afectan la seguridad ni la funcionalidad del vehículo.
Las gafas polarizadas, diseñadas para reducir el resplandor y mejorar la visibilidad al filtrar la luz, pueden hacer que estas marcas en el vidrio templado sean más visibles. Al filtrar ciertos tipos de luz, estas gafas resaltan irregularidades en superficies, incluyendo las marcas de enfriamiento en el vidrio. Por ello, los conductores que usan gafas polarizadas pueden notar estas manchas con mayor frecuencia y claridad.
Comunicaciones de los fabricantes
Diversos fabricantes de automóviles y de cristales templados han emitido explicaciones detalladas sobre este fenómeno, subrayando que las marcas de enfriamiento no son un defecto. Han insistido en que los consumidores no deben preocuparse ni considerar el reemplazo del vidrio debido a estas manchas. Los técnicos de los talleres también tienen la responsabilidad de informar a los clientes sobre la naturaleza de estas marcas, asegurando que son una característica normal del vidrio templado.
Comprender que estas manchas son una consecuencia natural del proceso de templado ayuda a los conductores a aceptar su presencia sin preocupación. Este conocimiento evita que los consumidores consideren innecesarios reemplazos costosos y les asegura que su vehículo es seguro. Además, al estar informados, los conductores pueden tomar decisiones más acertadas respecto a la atención y mantenimiento de su automóvil.
