La firma de Zuffenhausen tiene el privilegio de ensamblar sus deportivos vehículos en algunas de las factorías más avanzadas del momento. Sin embargo, hubo un momento de la historia en que la cadena de montaje de Porsche carecía de sofisticados robots y de maquinaria de precisión con la que dar vida a sus vehículos. Por aquellos entonces la compañía alemana construía sus legendarios 911 y 928 prácticamente a mano, como demuestra este vídeo ‘casero’ que fue rodado por un norteamericano que visitó la fábrica de Porsche en el año 1986.
Este vídeo se encuentra publicado en YouTube desde el año 2022 y fue subido por un usuario llamado tasturbo86, quien precisamente adquirió un Porsche 911 Turbo de la época. En el momento de la compra marcó la casilla de poder recoger su sensacional vehículo en la sede de la compañía en Stuttgart, cosa que implica un viaje a Alemania para conocer en persona su deportivo, así como realizar un completo tour por las instalaciones del fabricante, entre las que se encuentra visitar la línea de montaje.
Hasta el Porsche 911 de la generación 993 la producción era casi artesanal
Son prácticamente 20 minutos en los que se muestra gran parte del proceso de fabricación de estos deportivos, en los que está implicada gran mano de obra. Y es que de forma totalmente artesanal y mecánica son ensamblados desde los motores bóxer y V8, hasta la propia carrocería. También unos especialistas son los que llevan esos bloques al banco de potencia para comprobar que todo está en orden antes de ser llevados al interior de esos Porsche 911 y Porsche 928.
Este proceso de construcción prácticamente artesanal se prolongó hasta la llegada de la generación 993 del Porsche 911 a finales de los años noventa. Y es que ofrecer a sus clientes un deportivo que prácticamente estaba fabricado a mano se convertía en un sensacional atractivo de cara a sus competidores. Ahora bien, ese proceso de fabricación requería un elevado número de trabajadores, lo que supone un alto coste, que casi lleva a la quiebra al fabricante de Zuffenhausen. Eso hizo que finalmente la producción de sus vehículos tuviera cada vez más un componente ‘artificial’ en forma de maquinaria, que se encargaría de ensamblar futuros modelos como los Porsche 911 de la generación 996, el Boxster, el Cayenne…