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Así serían Madrid y otras ciudades europeas si no hubiera coches

¿Cómo serían Madrid, Londres, París, Berlín, Roma, Ámsterdam, Estocolmo y Bruselas si no circularan coches, o lo hicieran muy pocos, por sus principales calles? La compañía de movilidad Lynk & Co, que promueve un uso flexible del automóvil, ha hecho esta pregunta a más de 8.000 ciudadanos europeos y, en general, no hay dudas: todos imaginan las ciudades con más espacio para los viandantes, zonas verdes y más lugares de ocio.

En nuestra capital, Lynk & Co ha preguntado a más de 1.000 madrileños cómo transformarían su ciudad con menos coches. 7 de cada 10 ciudadanos ha respondido que convertiría las plazas de aparcamiento de las calles en espacios verdes. Y también han imaginado en qué se convertirían lugares tan icónicos como la Plaza de Cibeles si no tuvieran tráfico.

Pero el estudio ‘Ciudades reimaginadas por Lynk & Co’ revela muchas otras curiosidades.

La Plaza de Cibeles, en Madrid, se convertiría en una zona de playa.
Caminando en Madrid por una Plaza de Cibeles peatonal.

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¿Qué hacer con el espacio que ocupan los coches en Madrid?

París también gana espacios verdes.

En Madrid, además de convertir las plazas de aparcamiento en espacios verdes, un 40% de los ciudadanos querría aceras más anchas y un 36% más bancos donde poder descansar. En el caso de los parkings, uno de cada dos madrileños querría verlos convertidos en centros médicos, mientras que uno de cada tres los sustituiría por viviendas, museos o bibliotecas. Por otro lado, los jóvenes de 25 a 34 años, convertiría los aparcamientos en espacios de coworking.

«Con los coches aparcados el 96% del tiempo, nuestras ciudades tienen mucho potencial sin utilizar. Los resultados de la encuesta confirman que vamos en la buena dirección, y me entusiasma personalmente que los ciudadanos europeos, y en especial los madrileños, estén de acuerdo con nuestra visión de ciudades más accesibles, abiertas y verdes. Es hora de reclamar nuestro espacio humano frente a los coches«, explica Alain Visser, CEO de Lynk & Co.

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