Tras desaparecer hace poco más de un año, el Mercedes SL regresará por todo lo alto el año que viene. Sin duda, es uno de los lanzamientos más esperados de la marca alemana, por un lado, porque supone la vuelta de un mito con más de 70 años de éxito a sus espaldas y, por otro, porque será el modelo que recogerá el testigo del Mercedes-AMG GT cuando desaparezca del catálogo de Mercedes. Y es que, a pesar de ser un descapotable de planteamiento GT, como todos sus predecesores, el nuevo SL será más deportivo que nunca., de hecho, llegará con el sello de Mercedes-AMG.
Esperamos, por tanto, un SL más completo que nunca, aunque no perderá nada de esencia porque Mercedes ha decidido mantener la capota de lona y una configuración interior de 2+2 plazas. Esta nueva generación empleará la nueva plataforma modular MSA (Arquitectura Deportiva Modular) del fabricante germano y apostará por potentes mecánicas turboalimentadas de seis y ocho cilindros, si bien es probable que también recurra a conjuntos híbridos enchufables.
Electrificado
En principio, la gama estará formada por el Mercedes-AMG SL 53, equipado con un seis cilindros en línea con alrededor de 435 CV, por el Mercedes-AMG SL 63, que esconderá un V8 capaz de desarrollar unos 600 CV y, según parece, por un SL 73 que emplearía el mismo V8 y lo complementaría con otro motor eléctrico de unos 200 CV para entregar una potencia conjunta de unos 800 CV.
En cuanto a su aspecto, estas nuevas fotos espía no desvelan nada más de lo que ya sabíamos, de hecho, la unidad de pruebas cazada por nuestros colegas de CarPix contaba con más vinilo de camuflaje que las que vimos en verano. Tampoco se aprecían detalles de un interior que será similar al de los últimos lanzamientos de la marca, con una enorme pantalla táctil central e instrumentación digital.
