El nuevo Audi Q8 supone una ruptura estética frente a los Audi conocidos en la familia Q, especialmente en las vistas frontal y trasera. Para las luces delanteras, el cliente puede elegir entre dos variantes, ambas con tecnología LED: la de serie, con la luz diurna, la de cruce y varias funciones más agrupadas en la zona superior más visible, y la luz de carretera más abajo, en una sección más oscurecida; y la opcional, con sistema HD matrix LED, dotado de 24 diodos individuales por faro. Hablamos de un SUV de casi tres metros de batalla y cinco plazas en el que se podrá pedir una segunda fila compuesta por tres asientos individuales de ajuste longitudinal, lo que permitirá ampliar un maletero que, de partida, es enorme: 605 litros, y 1.755 abatiendo los respaldos traseros.