El Ford GT es un auténtico icono de la historia de la automoción, pero eso no ha sido suficiente para que Mansory decidiera no hacer de las suyas sobre uno de estos deportivos americanos. El modelo en cuestión recibe el nombre de Le Mansory, un nombre adecuado ya que el GT nació con el fin de vencer a Ferrari en la carrera de las 24 de Le Mans, por lo que si al nombre Le Mansory le quitamos el 'ory' nos queda la clásica carrera francesa. Visualmente el coche lleva tanto encima que práctiamente cuesta reconocer que es un GT pero, como los gustos son personales, dejamos que cada cual haga su particular juicio respecto al diseño. Lo que sí es una cifra exacta y sin opiniones o gustos personales son los caballos con los que cuenta bajo el capó. Y es que Mansory le ha hecho un pequeño ajuste al motor 3.5 V6, por lo que ahora es capaz de alcanzar los 710 CV de potencia y llegar hasta los 354 km/h de velocidad máxima. Casi nada…