Si eres un fan de Honda o simplemente de los coches, este museo contiene algunos de los modelos más legendarios e icónicos que ha fabricado la firma nipona, siendo uno de ellos este precioso NSX de 1990, conservado casi como el día en que dejó la fábrica. Se ve que la compañía los mima hasta el más mínimo detalle ya que la pintura roja está tan bien conservada que no creo que este coche haya visto la luz del sol en muchas ocasiones. Además, el motor está tan limpio y en tan buena forma como se espera de un modelo tan prestigioso y los chicos encargados del mantenimiento de estas joyas se emplean al máximo para que cada uno de estos coches icónicos se encuentre en perfecto estado de revista. El NSX, un modelo que salió a la venta en 1990 y que provocó un terremoto en el segmento de los deportivos con su motor V-TEC de 3 litros que producía 280 CV, fue un coche adorado por todos y que, aún a día de hoy, se mantiene como uno de esos 'top 10' de los más entusiastas. Un auténtico guerrero aún 30 años después.