El diseño, el tamaño, la posición del conductor, la ausencia de miles de botones y pantallas, el peso, la potencia, la aerodinámica, la anchura o la capacidad de carga del T.50 son solo algunos de los miles de aspectos que el veterano y conocido Gordon Murray ha tenido más que en cuenta a la hora de diseñar este espectacular superdeportivo. Y es que aunque tiene una potencia de 700 caballos, el peso total del coche es inferior al de un pequeño Mazda MX-5, por lo que no cabe duda de que la diversión está asegurada, y más si el que lo firma es el mismo que firmó el legendario McLaren F1.