Tras un primer episodio lleno de dificultades y éxitos, el 13 de abril de 1930, en la legendaria carrera de la Mille Miglia, Nuvolari y su Alfa Romeo 6C 1750 Gran Sport Zagato se hicieron con la victoria con un promedio de velocidad de 100,45 km/h, la primera vez que en esta carrera se rompía la barrera de los 100 km/h como promedio. La supremacía era increíble: un total de ocho 6C acabaron en los primeros once puestos.