En 2017, Jim Ratcliffe, el hombre más rico de Reino Unido y presidente de la multinacional química Ineos, tenía claro que había un hueco en el mercado de los 4×4. Compartió sus pensamientos en una cita con unos amigos en el pub Grenadier de Londres y juntos trazaron un plan para desarrollar el vehículo partiendo de cero. Así comenzó a escribirse la historia del Ineos Grenadier.