El iX se convierte en el nuevo buque insignia tecnológico de BMW por todo lo que aporta en cuanto experiencia de conducción y la relación con el conductor y los pasajeros. Los adelantos en esta denominada quinta generación ya contemplan un nivel 3 de conducción autónoma gracias a que es capaz de procesar hasta un volumen de datos 20 veces superior al de vehículos actuales de la marca.