Y es que Hennessey Performance utiliza un poderoso Chevrolet Camaro ZL1, un deportivo que esconde un corazón 6.2 V8 Supercharged que es capaz de generar 650 CV de potencia y 900 Nm de par motor, lo que no está nada mal. Y ni tan mal, porque esta máquina se ha devorado Nürburgring en 7 minutos y 29,6 segundos.