Todos aquellos Z-Tune eran entregados a sus afortunados clientes con un singular maletín fabricado en fibra de carbono, el cual es tan único como al vehículo al que acompañaban, pues su numeración coincide con el número de chasis del GT-R en cuestión. Y una placa en su exterior así lo acredita. Por si esto no fuera suficiente, en su interior se encontraba un CD original con el software del motor modificado por Nismo, un cable para el diagnóstico del vehículo y un catálogo con imágenes y pruebas de esta edición especial Z-Tune del GT-R R34.