En Estados Unidos por 67.995 dólares, el equivalente a unos 59.200 euros, te puedes comprar un impresionante Dodge Charger SRT Hellcat, una criatura que esconde un corazón 6.2 V8 Supercharged con 707 CV de potencia. Es el mismo motor que utiliza el Jeep Grand Cherokee Trackhawk y gracias a él, durante su fase de pruebas, los chicos de Dodge consiguieron llegar a alcanzar una velocidad máxima de 204,55 millas por hora, lo que son 329,19 km/h.