En el mundo del automovilismo y la innovación tecnológica, los récords suelen convertirse en símbolos de lo que vendrá. En el caso del Mercedes-AMG Concept GT XX, cada marca alcanzada es más que un número: es una declaración de intenciones de la división deportiva de Mercedes-Benz en su ruta hacia la electrificación de alto rendimiento.
El prototipo, presentado como parte de un ambicioso programa tecnológico, demostró en el circuito de alta velocidad de Nardò (Italia) un rendimiento sin precedentes. Allí rompió 25 récords (aquí más información) gracias a la combinación de dos innovaciones clave: motores de flujo axial y una batería con refrigeración directa. Ambas tecnologías debutarán en la arquitectura AMG.EA que la marca lanzará en 2026, y que promete situar la experiencia de conducción eléctrica en un nivel radicalmente nuevo.
Más allá de la velocidad: récords en recarga
Pero si en pista el Concept GT XX dejó huella, lo que ocurrió después fue aún más revolucionario. En una estación de recarga prototipo, el vehículo alcanzó una potencia de carga de 1.041 kW, es decir, más de un megavatio. Se trata de un registro nunca antes visto en un automóvil de este tipo, que confirma la capacidad de Mercedes-AMG para llevar el rendimiento eléctrico a dimensiones inéditas.
Lo más sorprendente fue la inmediatez: el coche alcanzó la marca del megavatio apenas medio segundo después de iniciar la sesión de recarga. Además, logró mantener una potencia de 1.000 kW durante dos minutos y medio, transmitiendo hasta 17,3 kWh en solo un minuto, equivalentes a 125 kilómetros de autonomía bajo ciclo WLTP. Cifras que transforman la percepción de lo que significa cargar rápido.
Este avance fue posible gracias a un cable CCS desarrollado especialmente para soportar hasta 1.176 amperios de corriente, combinado con una infraestructura que fusiona tecnologías de carga pesada con soluciones adaptadas al mundo de los turismos.
La batería: corazón de la revolución
El logro no se explica únicamente por la potencia de las estaciones de carga, sino por la ingeniería detrás de la batería del Concept GT XX. Diseñada desde cero en Affalterbach, el cuartel general de AMG, esta batería está inspirada en la Fórmula 1 y se basa en celdas cilíndricas NCMA de diseño alto y delgado.
Gracias a esta configuración, logra una densidad energética superior a los 300 Wh/kg, lo que permite almacenar más energía en menos espacio y peso. Además, incorpora un sistema de refrigeración directa mediante un aceite eléctricamente no conductor, que mantiene la temperatura óptima de cada una de las más de 3.000 celdas.
Este control térmico preciso asegura que la batería pueda entregar potencias continuas elevadas sin degradarse, incluso bajo condiciones extremas. La tensión superior a 800 voltios, por su parte, reduce el peso del cableado y acorta aún más los tiempos de recarga. Todo ello convierte a esta batería en un ejemplo de cómo la competición puede trasladar su conocimiento a la movilidad de calle.
Innovación conjunta: Mercedes-Benz y Alpitronic
Uno de los factores diferenciales del proyecto ha sido la colaboración entre Mercedes-Benz y Alpitronic, especialista en sistemas de carga ultrarrápida. Juntos desarrollaron una estación de recarga prototipo que combina lo mejor de dos mundos: un sistema MCS (Megawatt Charging System) pensado para camiones, adaptado a un formato CCS con cable ligero, capaz de transmitir corrientes de más de mil amperios de forma segura y estable.
Este enfoque integral —desarrollar vehículo e infraestructura en paralelo— abre nuevas posibilidades para el futuro de la recarga pública. Los aprendizajes obtenidos en este programa se aplicarán directamente al desarrollo de la próxima generación de cargadores de alto rendimiento que Mercedes-Benz instalará en sus hubs de recarga en Europa y Norteamérica.
Un anticipo de lo que viene
El Mercedes-AMG Concept GT XX no llegará a los concesionarios, pero sí anticipa el futuro de la marca alemana. Sus innovaciones en propulsión y recarga formarán parte de los próximos modelos basados en la arquitectura AMG.EA, que verá la luz en 2026.
La estrategia es clara: ofrecer a los clientes de Mercedes-AMG no solo vehículos eléctricos con un nivel de prestaciones digno de la tradición de Affalterbach, sino también una infraestructura que permita exprimir esas capacidades sin compromisos. Porque la verdadera revolución eléctrica no pasa solo por fabricar coches más potentes, sino por asegurar que recargarlos sea tan rápido y natural como repostar un motor de combustión.
Con sus récords en Nardò y en la recarga de un megavatio, el Concept GT XX se erige como un símbolo de esta nueva era: un automóvil que une la emoción de la velocidad con la practicidad de una carga ultrarrápida, marcando el camino hacia la próxima generación de deportivos eléctricos.
