El futuro del automóvil se escribe cada vez más en clave de alianzas estratégicas, y la que mantienen LG y Mercedes-Benz es prueba de ello. Las dos compañías han decidido pisar el acelerador en su colaboración bajo el paraguas de «One LG Solution», una estrategia que busca integrar lo mejor de cuatro divisiones del gigante coreano en los vehículos de la estrella de tres puntas.
Este nuevo acuerdo es un paso más en la relación entre los dos gigantes. La colaboración entre ambas marcas lleva años materializándose en productos concretos. Por ejemplo, el Mercedes EQS, buque insignia eléctrico de la firma alemana, ya incorpora un espectacular sistema de infotainment con tecnología OLED desarrollado conjuntamente. Una impresionante pantalla panorámica curva que atraviesa todo el salpicadero que no es solo un capricho estético, sino que representa la nueva filosofía de experiencia de usuario en el automóvil.

Pero los trabajos comunes entre la compañía automovilística alemana y la tecnológica coreana va mucho más allá de las pantallas. La división LG Display viene suministrando desde 2020 paneles P-OLED (OLED plástico) que permiten esos diseños curvos tan elegantes que vemos en el MBUX Hyperscreen. También la división Energy Solution aporta su experiencia en baterías para vehículos eléctricos, mientras que desde Innotek se está negociando ampliar la colaboración en sensores para conducción autónoma: cámaras, LiDAR y radar.
La unión de LG y Mercedes-Benz se basa en la innovación, la calidad y la sostenibilidad
La estrategia «One LG Solution» puesta en marcha por la compañía coreana es ambiciosa: unir las capacidades de LG Electronics, LG Display, LG Energy Solution y LG Innotek para ofrecer soluciones integrales a la marca alemana de la estrella. En un mercado donde la electrificación y la automatización avanzan a marchas forzadas, esta integración podría marcar la diferencia.
Así lo creen en las dos empresas. Por parte de Mercedes, su CEO, Ola Källenius ha declarado durante las conversaciones celebradas en Seúl que: «compartimos con LG una visión basada en la innovación, la calidad y la sostenibilidad». Por su parte, William Cho, máximo responsable de LG Electronics, se ha manifestado en similares términos, subrayando su compromiso con «la experiencia del usuario» y «la probada tecnología y fiabilidad» del grupo coreano.

Sin duda, el principal objetivo y la clave de esta alianza está en el desarrollo de los llamados SDV (Software-Defined Vehicles), vehículos definidos por software. En este terreno, la compañía coreana lleva años trabajando con la firma alemana en sistemas de infoentretenimiento y en ADAS. El objetivo es claro: que el coche se parezca cada vez más a un smartphone sobre ruedas, pero sin perder la esencia de lo que debe ser un automóvil premium.
Y más allá del coche hay otro campo donde la colaboración entre ambas compañías puede ser vital: la digitalización y la automatización de la producción también forman parte de esta visión compartida. Mercedes busca crear una red global de fabricación flexible y sostenible, y necesita socios tecnológicos capaces de acompañarle en ese camino.
Aunque las conversaciones se centran en «explorar nuevas oportunidades», lo cierto es que la base es sólida y permite que se pueda anticipar una integración aún mayor de tecnologías en los próximos modelos de la marca alemana: pantallas más grandes y envolventes, sistemas de asistencia a la conducción más sofisticados, baterías más eficientes y, quizá lo más importante, una experiencia de usuario más fluida y conectada.
En un sector donde Tesla marcó el camino de la integración vertical y tecnológica, alianzas como esta demuestran que los fabricantes tradicionales han aprendido la lección: el futuro no se construye solo, sino con los mejores socios posibles. Y en este caso, la ingeniería alemana ha encontrado en la tecnología coreana el complemento perfecto para seguir siendo referencia en la industria del automóvil premium.








