Audi 80 TDI. Probamos un mechero con ruedas

Se acercaba el Siglo XXI y en Motor16 queríamos adelantarnos a lo que nos iba a deparar el sector del automóvil. Nuevas tendencias, nuevos modelos... Hacíamos un poco de adivinos cuando mostrábamos algunos nuevos modelos, como el proyecto de monovolumen que iba a dar como resultado el Peugeot 807 o el Fiat Ulysse, el futuro BMW Serie 1 o el Mercedes SLK, que conocíamos entonces como 190 SLK.

Tres pruebas a fondo ocupaban un importante espacio esta semana. Por un lado, el Volkswagen Vento, con motor 1.8 de gasolina, que era en realidad un Golf con tres volúmenes y más capacidad gracias a un maletero tremendo.

El segundo modelo probado era un coupé japonés cuyo nombre, Eclipse, sigue instalado en la memoria de los buenos aficionados.

Y el tercero, el Audi 80, iba acompañado de unas siglas que han hecho historia estos 25 años. TDI era ese apellido que convertía a la berlina alemana en un rodador sorprendente. Con su motor de 90 caballos el 80 homologaba un consumo de 6,2 litros y, lo que es más sorprendente, una autonomía que superaba los 1.000 kilómetros. Era la hora de los diésel.