Los vicios ocultos de los coches son defectos graves que afectan al funcionamiento o a la seguridad del vehículo, y que no son apreciables en el momento de la compraventa. Estos defectos pueden ser de origen o de uso, es decir, que pueden haberse producido antes o después de la venta, pero siempre antes de la entrega al comprador.
Pueden dar lugar a reclamaciones por parte del comprador, que puede exigir al vendedor la reparación del coche, la rebaja del precio o la resolución del contrato, además de una indemnización por los daños y perjuicios causados. Estas reclamaciones se basan en el principio de que el vendedor está obligado a entregar al comprador un coche que sea apto para el uso al que se destina, y que no tenga defectos que disminuyan su valor o su utilidad.
3¿Cómo evitar el engaño en una compraventa de segunda mano de un coche?
Para evitar el engaño en una compraventa de segunda mano de un coche, es conveniente seguir una serie de consejos:
- Comprobar el estado del coche, tanto exterior como interior, y revisar los elementos más importantes, como el motor, la caja de cambios, los frenos, las ruedas, etc. Si es posible, hacer una prueba de conducción para verificar el funcionamiento del coche.
- Solicitar al vendedor la documentación del coche, como el permiso de circulación, la ficha técnica, el certificado de la ITV, el historial de revisiones y reparaciones, etc. Comprobar que los datos coinciden con los del coche, y que no hay cargas o multas pendientes.
- Pedir al vendedor un contrato de compraventa por escrito, en el que se especifiquen los datos de las partes, las características del coche, el precio, la forma de pago, la fecha y el lugar de entrega, y la garantía. El contrato debe firmarse por ambas partes y hacerse dos copias, una para cada uno.
- Exigir al vendedor una garantía por los posibles defectos del coche, que puede ser legal o contractual. La garantía legal es la que establece la ley, y es de seis meses para los vendedores profesionales y de un año para los particulares. La garantía contractual es la que pactan las partes, y puede ser superior o inferior a la legal, siempre que no sea abusiva o contraria a la ley.
- Ante cualquier duda o problema, consultar a un abogado especializado en derecho civil, que pueda asesorar y defender los derechos e intereses del comprador.
