La compañía de Mosheim está inmersa en el desarrollo del digno sucesor del extraordinario Bugatti Chiron. Y precisamente ha sido poniendo a punto esa prometedora criatura cuando la casa francesa ha detectado un pequeño ‘problemilla’ con su superdeportivo. Precisamente ahora que se cumplen seis años desde que fuera desvelado al mundo entero. Y no es algo que afecte a un número limitado de unidades, porque tres de cada diez vehículos fabricados van a tener que pasar por el taller.
Ha sido la propia compañía de Molsheim la que se ha puesto en contacto con la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Carreteras (NHTSA), porque todos los Bugatti Chiron afectados por este problema se encuentran en Estados Unidos. La casa francesa es la que comunicó el pasado 18 de enero ‘un comportamiento no conforme en un vehículo de desarrollo’. Y aunque no entra en detalles sobre ese vehículo en cuestión, todo apunta a que la casa francesa está hablando del sucesor de este Bugatti Chiron, que prometen mostrar este mismo verano y que podría estar poniéndose a punto en carreteras de Estados Unidos.
El problema se detectó en un prototipo del sucesor del Bugatti Chiron
Concretamente ese ‘comportamiento no conforme en un vehículo de desarrollo’ hace alusión a un problema relativamente menor que tienen todos los Bugatti Chiron que se han entregado en Estados Unidos. Estamos hablando de un total de 156 de los 500 fabricados, que van a tener que pasar por el concesionario para subsanar un pequeño incidente con sus cinturones de seguridad.
Y es que la compañía de Molsheim ha instalado en todos los Bugatti Chiron un aviso acústico que está configurado según la normativa europea, la cual no cumple con los estándares estadounidenses y canadienses. De ahí que la NHTSA esté preocupada, porque a velocidades inferiores a los 25 km/h este aviso sonoro al circular sin los cinturones de seguridad abrochados no es inmediato. Que es lo que debe suceder al otro lado del océano.
Un fallo que será solucionado con un ajuste del software
Por el contrario si que permanece una señal luminosa en el cuadro de instrumentos, mientras que esa señal acústica comienza a actuar cuando el vehículo ha recorrido 500 metros o hayan pasado 60 segundos desde que se puso en marcha el vehículo. Este detalle preocupa a la NHTSA sobre posibles daños a sus ocupantes en caso de sufrir un accidente a baja velocidad.
Este pequeño contratiempo tiene fácil solución. Además, la compañía francesa ha comenzado ya a ponerse en contacto con todos los clientes afectados, informándoles de que ya hay disponible una actualización de software para solucionar dicho problema con todos los Bugatti Chiron que hay en suelo americano. Ahora bien, no está claro si la firma de Mosheim obligará a los propietarios a llevar su vehículo a un taller oficial o mandará a sus mecánicos a casa del propietario para instalar dicha actualización en su codiciado vehículo.
