Los chicos de Toyota han revelado que los datos privados de clientes de unos 2,15 millones de sus coches han estado disponibles para el gran público durante cerca de una década. Si bien, estos datos afectan exclusivamente a clientes de Japón, que han registrado los datos en la propia nube del fabricante nipón.
Toyota asegura que hubo un error humano a la hora de configurar su nube, porque alguien seleccionó en su día la visibilidad pública en lugar de privada. Pero esto fue allá por el año 2013, mientras que hasta mediados de abril de este mismo año no se dieron cuenta de dicho error.
La nube de Toyota funciona desde enero de 2012
Reuters indica que el sistema en la nube de Toyota incluye información como la propia ubicación de los vehículos, los números de identificación… Dicho error afecta a los propietarios que se suscribieron al servicio entre el 2 de enero de 2012 y el 17 de abril de 2023.
Por lo tanto, todos aquellos clientes que se suscribieron al servicio T-Connect de Toyota se han visto afectados por este error. Dicho servicio permite la conexión automática a centros de llamadas para la gestión importante de vehículos, asistencia de emergencia en el caso de un accidente, asistencia a la conducción habilitada por voz… Aunque a todos ellos también debes añadir a los propietarios de un Lexus, porque el T-Connect pasa a llamarse G-Link en la firma premium de la casa nipona.
Ya se han tomado medidas para evitar el robo de datos
La compañía japonesa está tomando medidas para evitar un problema similar en el futuro. Para ello dice que van a introducir un sistema para auditar la configuración de la nube, así como va a buscar educar mejor a los empleados sobre las reglas de manejo de datos y establecerá un sistema para monitorear de forma continua las configuraciones importantes cuando se suban a la nube. También aseguran que están llevando a cabo una investigación de todos los entornos en la nube que han sido administrados por Toyota Connected Corp, implantando medidas para bloquear el acceso externo desde el mismo momento en que se descubrió el problema.
