Tan solo han pasado tres años desde que se presentara al mundo entero el sensacional Toyota GR86, un emocionante deportivo que hemos visto llegar con cuentagotas a Europa en compañía de su alma gemela, el Subaru BRZ de segunda generación. Sin embargo, ya comienzan a aparecer rumores de todo tipo respecto a su digno sucesor, el cual la firma japonesa quiere ofrecerlo sin limitaciones en todo el mundo. Y para ello habrá que hacer numerosos cambios, entre los que habrá radicales diferencias bajo su capó delantero que podrían romper el acuerdo entre Toyota y Subaru.
Como sabrás, los actuales Toyota GR86 y Subaru BRZ se decantan por un motor bóxer atmosférico con cuatro cilindros y 2.4 litros que es considerablemente más poderoso que el utilizado por sus antecesores. Sin embargo ese bloque con las actuales normativas anticontaminación que rigen en Europa hace que limite la entrada de estos dos deportivos en el viejo continente. De ahí que Toyota haya decidido desmarcarse de forma clara con un bloque que si permitiría su comercialización ‘sin limites’ en Europa.
El futuro Toyota GR86 podría dejar aparcado el motor bóxer

De ahí que todos esos rumores hayan culminado con que esa tercera generación del Toyota GR86 va a debutar en el año 2028, escondiendo bajo su capó un bloque que guarda una estrecha relación con el conocido propulsor G16E-GTS. Este no es otro que el sensacional 1.6 Turbo de tres cilindros que actualmente emplean los Toyota GR Yaris y Toyota GR Corolla. Ahora bien, en este futuro Toyota GR86 será un tanto diferente.
Tanto es así que ya hay quien ha confirmado que bajo su capó delantero nos vamos a encontrar con una evolución de ese motor de tres cilindros y equipado con turbocompresor, el cual va a reducir su cilindrada hasta los 1.4 litros. Pero para contrarrestar ese punto, los ingenieros de la compañía nipona van a añadir un sistema híbrido para alcanzar una potencia superior a los 300 CV.
Tres cilindros, turbo y tecnología híbrida ligera para este deportivo

De ser real el Toyota GR86 perderá una de sus señas de identidad, que es un bajo centro de gravedad conseguido gracias al uso del motor bóxer ideado por Subaru. Ahora bien, ese detalle los ingenieros de la casa nipona lo buscarán conseguir por otros caminos, como puede ser ubicando lo más bajo posible la batería de 48 voltios de su parte electrificada. Y es que se rumorea con un sistema híbrido equivalente al utilizado en los Land Cruiser e Hilux, detalle que permitiría conservar un motor delantero, propulsión trasera, así como combinarlo con cambios manuales y automáticos.
Por el momento la compañía japonesa no se ha pronunciado al respecto, por lo que toda esta información hay que tomarla con mucha cautela. Independientemente de ello esta tecnología podría casar a la perfección con la filosofía del Toyota GR86, al que muchos entusiastas siempre le han pedido la llegada de un turbocompresor, mientras que con esta tecnología electrificada podría minimizar consumos y emisiones. Pero de ser así, también se podría poner punto y final a la colaboración entre ambas compañías niponas, pues Subaru perdería todo lo andado con sus anteriores BRZ.


