La empresa Waymo, pionera en el desarrollo del taxi autónomo, se encuentra bajo investigación por parte de la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA) de Estados Unidos. La Oficina de Investigación de Defectos (ODI) ha recibido informes de 22 incidentes relacionados con los vehículos equipados con el sistema de conducción autónoma de quinta generación.
Los incidentes reportados incluyen «colisiones con objetos estacionarios y semiestacionarios, como puertas y cadenas, colisiones con coches estacionados y casos en los que el ADS pareció desobedecer los dispositivos de control de seguridad del tráfico». La ODI también destaca que algunos de estos accidentes ocurrieron «poco después de que el autopilot mostrara un comportamiento inesperado cerca de los dispositivos de control de seguridad del tráfico».
¿Qué problema tiene el taxi autónomo de Waymo?

Además de los informes internos de Waymo, la NHTSA ha tomado en cuenta reportes públicos sobre el taxi autónomo de la empresa que se han desviado de su ruta. Entre estos casos, se mencionan vehículos que han ingresado a zonas de construcción y que han circulado en el carril equivocado, poniendo en riesgo a otros usuarios de la vía pública. También están los que confunden camisetas con señales de tránsito y reaccionan de forma repentina complicando el tránsito.
La Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras ha iniciado una evaluación preliminar para analizar el desempeño del sistema ADS de quinta generación de la empresa estadounidense. El objetivo es evaluar su capacidad para detectar y responder a los dispositivos de control de tráfico. Además, de evitar colisiones con objetos y vehículos estacionarios y semiestacionarios. Y, por último, manejar escenarios similares a los descritos en los informes.
¿Hubo heridos por culpa del sistema del taxi autónomo?

Si bien no se han reportado heridos en ninguno de los accidentes, la NHTSA se muestra preocupada por el «comportamiento inesperado de los ADS». Waymo, por su parte, ha mantenido un perfil bajo durante la investigación, pero ha expresado su «orgullo por el desempeño y el historial de seguridad» de sus vehículos, así como su «compromiso con la transparencia en materia de seguridad».
La investigación a esta empresa de coches autónomos se produce poco después de otra revisión similar a la tecnología de conducción autónoma de Zoox. En ese caso, dos Toyota Highlanders sin conductor de esta marca estuvieron involucrados en colisiones tras «frenar inesperadamente», lo que provocó que motociclistas los impactaran por detrás. Mucho más graves que los casos que sufrió la actual investigada.