Hace unos días, en la Plaza de San Pedro del Vaticano, vivimos una imagen un tanto curiosa. Un grupo de moteros conocidos como los Jesus Bikers le entregaron una moto BMW R18 de color blanca al Papa León XIV con detalles únicos, como el escudo pontificio en el depósito, la bandera del Vaticano en la parte trasera y otros símbolos religiosos.
Lejos de simplemente agradecer el regalo, el Pontífice se subió a la moto, la bendijo y firmó en el depósito. Lógicamente, esas imágenes y ese gesto (que han dado la vuelta al mundo) han hecho que la moto sea ya una pieza única y ha despertado interés internacional. Ahora bien, no va a formar parte del parque móvil del Vaticano ni mucho menos, sino que León XIV ha decidido destinar la BMW a fines solidarios.
1Este será el destino de esta moto BMW
La moto no va a formar parte del parque móvil ni tampoco se va a quedar de recuerdo en la Santa Sede. Igual que ya hizo el Papa Francisco cuando hace unos años le regalaron un Lamborghini y lo subastó, León XIV ha decidido seguir el mismo camino con esta BMW. Se va a subastar en Múnich el próximo 18 de octubre por la casa Sotheby’s, uno de los nombres más prestigiosos en el sector de las pujas internacionales.
El dinero recaudado en la subasta va a ir destinado íntegramente a Missio Austria, una organización que impulsa proyectos de cooperación en distintos países. En concreto, la subasta de esta moto BMW R18 va a financiar proyectos educativos en Madagascar. Allí, miles de menores trabajan en condiciones extremas en minas de mica, un mineral muy utilizado en la industria tecnológica. El objetivo es escolarizarles, darles mayor seguridad y la posibilidad de tener un futuro.
Lógicamente, los Jesus Bikers están encantados con la decisión del Pontífice, porque también quieren aprovechar la cultura motera para proyectos que pueden cambiar la vida de tantas personas.
