Los radares de la Guardia Civil de Tráfico son omnipresentes en nuestras carreteras, desempeñando un papel crucial tanto en la regulación del tráfico como en la recaudación de multas. Sin embargo, la legalidad de estos dispositivos ha sido objeto de debate, especialmente en lo que respecta a la distancia que deben mantener respecto a los guardarraíles.
Aunque son herramientas esenciales para controlar la velocidad y mejorar la seguridad vial, la pregunta que surge es: ¿todos los radares de la DGT cumplen con las normativas establecidas?
6Llamando a la transparencia y la legalidad
En conclusión, la legalidad de los radares de la DGT está en entredicho debido a posibles desviaciones de normativas establecidas, como la UNE EN 1317. Es esencial que las autoridades aborden estas preocupaciones de manera transparente y tomen medidas correctivas si se confirma el incumplimiento. Garantizar la legalidad y la eficacia de los radares es fundamental para mantener la confianza de los ciudadanos en el sistema de regulación del tráfico y, lo más importante, para salvaguardar la seguridad en nuestras carreteras.