Hace unos meses veía la luz el Opel Manta GSe ElektroMOD, un modelo que refleja a la perfección la creciente tendencia de transformar coches clásicos en los denominados RestoMods, con lo último en tecnología y una imagen renovada. Ahora, la marca nos cuenta los detalles de cómo se ha desarrollado.
La idea se formó rápidamente. El Manta, con 50 años de antigüedad, se convirtió en un niño de nuestro tiempo: eléctrico, sin emisiones y tan emocional como debe ser una verdadera leyenda. «El GSe es un homenaje al Manta de antaño y al mismo tiempo una declaración del presente de la marca. Quizás es diferente de lo que se espera de nosotros», ha asegurado Quentin Huber, Director de Estrategia de Marca y Redes Sociales de Opel.
En nada de tiempo, el proyecto recibió luz verde desde la dirección, y la idea de un ElektroMOD se hizo realidad en pocos meses. El equipo de desarrollo ha conservado el coche original al mismo tiempo que ha aportado las últimas innovaciones. Por ejemplo, el Pixel-Vizor, el puesto de conducción digital o la propulsión 100% eléctrica.
Duro trabajo
Todo comenzó en las oficinas de Opel Classic. Allí se encontraba un Manta A de color naranja con techo de vinilo negro y transmisión automática, una unidad que Opel Classic recibió en 1988. Tras ser electrificado y haber pasado la prueba TÜV, el coche recibió su nueva pintura amarillo neón.
En su interior, se incorporaron unos nuevos asientos Recaro, similares a los del deportivo Opel ADAM S, que ha sustituido a los asientos originales sin reposacabezas del Manta A.
El propietario original eligió en su día una transmisión automática, algo raro para un Manta de los años 70 y el equipo anhelaba la clásica caja de cambios manual de cuatro velocidades. Por ello, diseñaron un adaptador que permitía acoplar la caja de cambios Opel a un embrague más grande. Además, se instalaron pinzas de freno más grandes en el tren delantero y en el tren trasero el equipo de tambores dio paso a unos discos.
La potencia del motor síncrono de 108 kW (147 CV) se transmite a la carretera mediante una tracción trasera. La batería de iones de litio de 31 kW se ha instalado en el maletero lo más adelantada posible, para lograr una buena tracción y un centro de gravedad bajo.