La marca Omoda, perteneciente al gigante asiático Chery, ha anunciado sus planes de iniciar la fabricación de su último modelo en España. Lo que parece un apoyo fuerte al mercado español, es también una estrategia destinada a evitar los aranceles que actualmente gravan los coches importados desde China. Esta decisión supone un movimiento clave para la empresa y podría tener un impacto significativo en la industria automotriz española.
El anuncio llega tras el lanzamiento de la firma asiática en el mercado español, acompañado de una potente campaña publicitaria que ha generado un gran interés entre los consumidores. Sin embargo, la marca ha identificado los aranceles como un obstáculo para su expansión en el mercado europeo y ha decidido tomar medidas para mitigar su impacto.
¿Qué beneficio consigue Omoda al fabricar su nuevo modelo en España?
La estrategia de Omoda implica fabricar una parte de sus vehículos en España, lo que le permitirá eludir el 10 por ciento de aranceles que actualmente afectan a los coches importados de China. Este enfoque se basa en el concepto de ‘Completely Knocked Down’ (CKD), en el que los vehículos se ensamblan en su país de origen y luego se desmontan parcialmente para volver a montarse en el país de destino.
El objetivo a largo plazo es poder establecer una cadena de producción completa en España, lo que requerirá inversiones significativas en la renovación de la planta y una cuidadosa planificación. Sin embargo, la empresa ve en esta iniciativa una oportunidad para consolidar su presencia en Europa y mejorar su competitividad en el mercado global, sobre todo ante sus competidoras asiáticas como Kia y Hyundai.
¿Dónde estará ubicada la nueva fábrica de Omoda?
En este caso, se espera que esta operación se lleve a cabo en la antigua planta de Nissan en Barcelona, que actualmente se encuentra inactiva. El proyecto, que está siendo coordinado por la empresa BTech, podría suponer un impulso económico importante para la región y generar empleo en el sector automotriz. La decisión de fabricar parte de sus vehículos en España también podría tener un efecto dominó en la industria automotriz del país, atrayendo a otros fabricantes chinos e impulsando la inversión extranjera.
En última instancia, la estrategia de Omoda refleja la creciente importancia de la fabricación local en un mercado globalizado. A medida que las empresas buscan formas de minimizar costos y mejorar la eficiencia, la producción regional se convierte en una opción cada vez más atractiva para ellas.
