Los patinetes eléctricos, también conocidos como Vehículos de Movilidad Personal (VMP), han pasado de ser la forma de movilidad favorita de miles de personas a estar limitados en muchas ciudades. Al principio, cuando la mayoría eran de alquiler, muchas personas empezaron a utilizarlos para desplazarse al trabajo, hacer recados o simplemente por ocio.
Después, ese ‘boom’ hizo muchos compraran sus propios patinetes eléctricos e incluso los combinaran con el transporte público. No obstante, las ordenanzas municipales de casi todas las ciudades españolas han prohibido llevarlos en la mayoría de autobuses, metros y trenes. El año pasado, la Dirección General de Tráfico (DGT) introdujo una normativa para todos los patinetes eléctricos nuevos, y ahora hay una que está a punto de despedirse de los VMP de alquiler y de todas las empresas con licencia.
¿El motivo? La convivencia entre peatones, ciclistas, vehículos y los propios patinetes eléctricos. Por eso, la decisión que ha tomado este ayuntamiento es que desaparezcan de sus calles en las próximas semanas.
En esta ciudad ya no podrás alquilar un patinete eléctrico
La ciudad que ha tomado esta decisión es Zaragoza, pues a partir de junio de 2025 ya no podrán circular patinetes eléctricos de alquiler por sus calles. Así lo ha confirmado el Ayuntamiento tras anunciar que no va a renovar las licencias de explotación de las dos compañías que prestaban este servicio en la ciudad, Bird y Bolt.
Lo que les ha llevado a tomar esta decisión fue un accidente ocurrido el pasado mes de febrero, cuando un hombre de 81 años falleció tras ser atropellado por un patinete eléctrico en pleno Paseo de la Independencia. La alcaldesa de la ciudad, Natalia Chueca, se pronunció de inmediato y aseguró que lo ocurrido solo evidencia los riesgos que entrañan este tipo de vehículos en espacios urbanos compartidos.
Desde entonces, el consistorio ha optado por endurecer su política de movilidad en relación con los VMP. Según fuentes municipales, Bolt contaba con 600 patinetes repartidos por toda la ciudad, mientras que Bird operaba con unos 300. Ambas empresas cesarán su actividad una vez finalicen sus contratos actuales, sin posibilidad de prórroga.
La medida convierte a Zaragoza en una de las grandes capitales españolas que ha actuado de forma contundente frente a los servicios de alquiler de patinetes eléctricos. El argumento principal: la seguridad vial y la creciente siniestralidad asociada a estos vehículos.
¿Y si quiero utilizar un patinete propio?
Aunque el alquiler desaparecerá, los zaragozanos todavía podrán circular con patinetes eléctricos particulares, siempre que respeten la normativa vigente. La ciudad cuenta desde septiembre de 2024 con una Ordenanza de Movilidad que regula el uso de este tipo de vehículos.
En primer lugar, el uso del casco es obligatorio. Todos los conductores de VMP deben llevarlo correctamente abrochado durante todo el trayecto. La multa por incumplir esta norma puede alcanzar los 150 euros. Además, la edad mínima para circular con patinete eléctrico por la vía pública es de 16 años.
Otro aspecto a tener en cuenta es el seguro de responsabilidad civil. Zaragoza fue una de las primeras ciudades de España en exigir esta cobertura obligatoria para quienes circulen con un patinete propio. Desde el 11 de septiembre de 2024, cualquier usuario debe disponer de una póliza en vigor que cubra posibles daños a terceros. En caso de no llevarlo, también se enfrenta a una sanción de hasta 150 euros.
Por tanto, si quieres circular con un patinete eléctrico en Zaragoza, deberás comprarte uno homologado. La ciudad no los elimina por completo, pero sí que endurece la normativa para hacerlo mucho más seguro, tanto para los conductores como para los peatones.
