comscore

Nissan GT-R by Kuhl. Una obra de orfebrería

Del Nissan GT-R ya habíamos visto muchas preparaciones alocadas y diferentes pero no habíamos visto nada como lo que ha presentado Kuhl Racing en el Salón de Tokio. Se trata de un auténtico monstruo de devorar circuitos con un aspecto más que llamativo gracias a una peculiar carrocería labrada a mano.

Trabajo con muchas horas a sus espaldas

Es probablemente el GT-R más extraño y a la vez hortera que hayas visto en tu vida pero sin embargo consigue lo que se propone, que se hable de él y que sea vistoso. Y como para no hacerlo con ese acabado exterior. Monta un Kit de carrocería único hecho a medida y labrado durante horas. Su figura ha sido esculpida y perfeccionada por artesanos hasta conseguir el resultado final.

Su superficie es fruto de un minucioso trabajo de tallado, creado sobre una nueva carrocería de fibra de vidrio hecha desde cero, que aumenta el ancho del modelo y hace que el GT-R luzca un aspecto mucho más salvaje y musculoso. Posteriormente el equipo de Kuhl Racing cromó su superficie para poder crear una base donde asentar la nueva pintura dorada.

Como era de esperar, estos cambios han venido acompañados de una subida de potencia del ya de por sí poderoso bloque V6 de 3.8 litros. Gracias a una profunda remodelación mecánica, este coche ha podido pasar de los 550 caballos de potencia origniales hasta los 820 caballos que tiene ahora. Aunque no ha sido fácil llegar a esa cifra, ya que para conseguirlo han tenido que utilizar la instalación de dos nuevos turbocompresores y un sistema de escape trenzado con silenciadores de titanio.