La llegada de la borrasca Olivier ha teñido de tonos ocres el cielo y muchos vehículos en toda España. Es mirar por la ventana y ver los coches cubiertos por una capa marrón. La combinación de polvo en suspensión y lluvia de barro está dejando huella; no solo en la carrocería, también en la seguridad de los conductores.
Conducir en esas condiciones conlleva riesgos que no siempre tenemos en cuenta. Por eso, desde Norauto, especialistas en el mantenimiento del automóvil, insisten en la necesidad de actuar cuanto antes. La razón es muy sencilla: tu seguridad está en juego. Y en este artículo, te explicamos por qué.
4Ojo a los frenos: de ellos depende tu seguridad
Con la llegada de Olivier, los frenos cobran especial relevancia. La mezcla de agua, barro y calima reduce la adherencia al asfalto y puede duplicar la distancia de detención, incluso a velocidades bajas. Cualquier metro de más puede significar un accidente. Por eso, revisarlos es una prioridad.
El desgaste de las pastillas y discos de freno se acelera en condiciones adversas. Si al frenar escuchas ruidos extraños, el pedal está más blando de lo normal o necesitas más distancia para parar el coche, tocará pasar por el taller. Unos frenos en buen estado dan la tranquilidad de que, ante cualquier imprevisto, podrás detenerte a tiempo.