Miguel tiene 47 años y lleva cerca de dos décadas trabajando en una estación de Inspección Técnica de Vehículos (ITV). Por supuesto, conoce al dedillo cómo funciona el sistema, qué tienen en cuenta todos los trabajadores a la hora de calificar a un vehículo como favorable o desfavorable, y ha visto desde los utilitarios de los años 90 hasta los últimos SUVs del mercado.
«El conductor suele venir nervioso, como si fuese un examen, pero la ITV no está pensada para suspender a nadie. Nuestro objetivo es comprobar que el coche circula en condiciones de seguridad», explica Miguel.
Además, confiesa que las ITV ‘tiran’ a muchos vehículos al cabo del año por pequeños fallos que el propietario podría haber detectado antes de acudir a la revisión. Por eso, esta es la guía definitiva para pasar tu próxima inspección a la primera, aunque tengas un coche antiguo.
2No descuides las emisiones y prepara el motor

Uno de los puntos ‘conflictivos’ es la prueba de gases. Muchos vehículos, sobre todo los diésel antiguos, se quedan fuera por un exceso de emisiones. Estos son algunos consejos para que no te ‘tiren’ por esta prueba:
- Circula varios días antes por carretera a un régimen de revoluciones más alto de lo habitual para limpiar el sistema de escape.
- Revisa el filtro de aire y, si está sucio, cámbialo.
- Siempre viene bien repostar combustible de calidad en lugar de elegir siempre la opción más económica.
Este trabajador de la ITV explica que el técnico solo conecta la máquina y mide lo que expulsa el escape. Si el coche está en buen estado, vas a superar la prueba sin ningún problema.