Muchos fabricantes de automóviles están erradicando de su gama de productos los propulsores diésel, pero Mazda no es uno de ellos por muchos eficientes corazones Skyactiv-G y Skyactiv-X que están lanzando al mercado en los últimos tiempos.
También es curioso lo maltratados que están por ejemplo en España, mientras que en mercados como Japón ahora el gobierno está fomentando la compra de vehículos diésel con incentivos y descuentos por sus bajas emisiones contaminantes por la aparición y uso de avanzados filtros de partículas entre otros muchos sistemas anticontaminación.
El 2.2 Skyactiv-D llega a Estados Unidos
Y curioso también es la llegada de sus eficiente motores Skyactiv-D a un mercado eminentemente gasolina, como es el caso de Estados Unidos, porque ahora la firma de Hiroshima ha confirmado en el Salón de Nueva York que este mismo verano se ofrecerán allí los Mazda CX-5 2.2 Skyactiv-D.
Este corazón diésel, que estrena un turbocompresor de doble entrada para ofrecer una suave respuesta en marcha, proporciona 170 CV de potencia a 4.000 rpm y un par motor de 400 Nm, disponibles a 2.000 rpm.
Para que te hagas una idea, en España este corazón eroga 150 CV, pues es la única opción diésel disponibles por el momento.
A Estados Unidos sólo va a llegar combinado con un cambio automático de 6 velocidades y con un sistema de tracción total AWD. Además, se limita exclusivamente al equipamiento más completo, que allí se denomina Signature.
Mazda no ha desvelado sus prestaciones (el de 150 CV automático y AWD firma 196 km/h de punta y 10,3 segundos para acelerar de 0 a 100 km/h), pero asegura que es un 15% más ahorrador que un Mazda CX-5 2.5 Skyactiv-G Turbo de 250 CV, una versión con acabado Signature que en Estados Unidos cuesta 37.935 dólares (33.695 euros). Eso son 3.065 dólares (2.720 euros) menos de lo que allí costará esta versión diésel a igualdad de equipamiento, pues arranca en 41.000 dólares (36.415 euros).