Las 24 Horas de Nürburgring, celebradas en el mítico Nordschleife denominado infierno verde, son conocidas por ser una de las carreras de resistencia más desafiantes del mundo. El apodo ha cobrado un significado aún más literal debido a las condiciones climáticas extremas que marcaron el inicio de la competencia. Una feroz tormenta de granizo obligó a la organización a detener la carrera, generando un caos en la pista y dejando a muchos equipos y pilotos a la espera de mejores condiciones para retomar la acción.
La carrera comenzó bajo un brillante sol a las cuatro de la tarde, con Maro Engel al mando de su Mercedes desde la pole position, seguido de cerca por Jorg Müller y su BMW M6 en segunda posición. Sin embargo, solo media hora después del inicio, el clima cambió drásticamente. Lo que comenzó como una ligera lluvia se convirtió rápidamente en una tormenta de granizo, afectando especialmente algunas partes del extenso circuito de 25 kilómetros. El líder de la carrera, Engel, describió la situación como «un caos total», con visibilidad reducida y velocidades limitadas a entre 40 y 60 kilómetros por hora.
El infierno verde logró que se suspenda la carrera
La organización, considerando las condiciones peligrosas, decidió detener la carrera. Se esperaba que la acción se reanudara a las 19:20, más de dos horas después de la interrupción inicial, en un intento de garantizar la seguridad de los pilotos y los equipos. Esta pausa forzosa añadió una capa adicional de incertidumbre a una carrera ya de por sí impredecible, reflejando la naturaleza implacable del Nordschleife.
Con la participación de figuras destacadas del mundo de los GT como Alex Buncombe, Robin Frijns, el español Lucas Ordoñez, y pilotos de la talla de Augusto Farfus y Maximilian Gotz, las 24 Horas de Nürburgring son un evento de gran importancia en el calendario del automovilismo. Este año, la carrera sirve no solo como un desafío por derecho propio, sino también como un preludio a las 24 Horas de Le Mans. La combinación del trazado completo de Nürburgring y un número de inscritos que supera los 200 vehículos asegura que esta carrera sea un espectáculo único.
Hay corredor que pudieron vencer a este infierno verde
La sesión de clasificación, celebrada la noche anterior, también estuvo marcada por la lluvia, lo que complicó las condiciones de la pista. A medida que el circuito se fue secando, los tiempos comenzaron a mejorar, y finalmente, el Mercedes AMG GT3 #9 de Maro Engel consiguió la pole con un tiempo de 8:12. Esta actuación destacada bajo condiciones adversas subraya la habilidad y el talento necesarios para competir en una pista tan exigente.
Además del evento principal, las 24 Horas de Nürburgring incluyen carreras teloneras que añaden más emoción al fin de semana. Entre ellas, se encuentran competiciones como la Audi TT Cup, el WTCC y carreras con coches históricos. En una de estas pruebas, el español Daniel Juncadella compitió con un Mercedes 190E Evo2. Aunque Juncadella no pudo finalizar la carrera, su participación fue un recordatorio de la rica historia y la tradición que envuelven este evento.