A comienzos del Siglo XX el mundo del automóvil vio nacer a un buen número de ilustres firmas automovilísticas con el sello ‘Made in USA’ que desafortunadamente no han conseguido perdurar en el tiempo. La emblemática Packard fue una de ellas. Fundada en Detroit allá por el año 1899, finalmente acabó desapareciendo en el año 1958, aunque habiendo dejado en su haber algunos de los automóviles más lujosos de todo Estados Unidos.
A lo largo de todos estos años mucho se ha estado rumoreando con el regreso de Packard, cosa que acaba de ocurrir 67 años después de su adiós con esta interesante berlina de lujo que ahora mismo tienes delante de tus ojos. Aunque sin duda alguna lo más significativo del regreso a la vida de esta legendaria marca de automóviles es que lo hace muy lejos de aquel Detroit que la vio nacer.
Packard ha regresado a la vida gracias a un carrocero en Países Bajos

Bautizado con el nombre de Packard Excellence, esta llamativa berlina ha sido creada por el exclusivo carrocero holandés JB Classic & Bespoke. Conocido por sus magníficas restauraciones, también cuentan con una división Bespoke que está dedicada a creaciones únicas, como es el caso de esta berlina cuyo diseño e ingeniería han corrido por cuenta del estudio CinovarA, también con sede en Países Bajos.
A nivel estético este Packard Excellence no recuerda a aquellos clásicos automóviles creados por la compañía americana. Tampoco se inspira en modernos prototipos firmados por la marca, como el exclusivo Twelve que presentaron en el año 1999. Concretamente sus creadores aseguran haberse inspirado en el maravilloso Facel Vega Excellence, una lujosa berlina francesa que por muy poco estuvo a punto de lucir el emblema de la marca americana a finales de la década de los años ‘50.
Nace desde la base de un lujoso Bentley Flying Spur

Y es que por aquellos entonces Studebaker-Packard estuvieron explorando la posibilidad de lanzar su propio modelo nacido de aquel Facel Vega. Ahora bien, utilizando además su propio motor V8 bajo el capó. Finalmente el proyecto no cuajó por culpa de Daimler-Benz. Y es que la casa alemana, quien tenía un acuerdo de distribución con Studebaker-Packard, se opuso descartando ese plan, de manera que la historia de la compañía americana siguió su camino.
Como te podrás imaginar, para dar vida a este sensacional Packard Excellence tampoco se ha partido desde cero, de manera que se ha utilizado un vehículo ya conocido como base. Que por cierto no ha sido fabricada en Estados Unidos ni en Francia. Concretamente los orígenes de esta artesanal berlina hay que buscarlos en Crewe, donde tiene su cuartel general Bentley. Y es que la base no es otra que la de un Flying Spur de segunda generación, que estuvo en activo entre 2013 y 2019.
Construir este Packard Excellence les ha llevado 17.000 horas de trabajo

De aquel vehículo se ha utilizado la base, porque JB Classic & Bespoke ha creado sobre ella una carrocería completamente nueva y con infinidad de detalles confeccionados para la ocasión. No en vano aseguran que este proyecto les ha llevado alrededor de 17.000 horas de artesanal trabajo. Y no seremos nosotros quienes lo pongamos en duda, pero cierto es que en algunas partes de esa silueta aparece el ADN de la firma británica. Cosa que también sucede en el habitáculo de este Packard Excellence.
A pesar de todo llaman la atención los particulares faros delanteros colocados en posición vertical y dotados de tecnología Full LED. Estos escoltan a una generosa parrilla de tres piezas y cromada, la cual contrasta a la perfección con ese tono burdeos elegido para vestir una carrocería presidida por la ‘Diosa de la Velocidad’ que acompañó a los modelos de la firma americana y que se oculta para quedar fuera de la vista de esos amigos de lo ajeno.
Un emotivo homenaje a una marca que desapareció hace 67 años

Otro detalle que llama la atención es que los chicos de JB Classic & Bespoke han creado unas puertas traseras que ahora tienen un sistema de apertura suicida, que le aporta a este Packard Excellence un aire a las criaturas de otra exclusiva firma automovilística británica. Crear esas nuevas bisagras integradas en el pilar C no fue una tarea sencilla, como tampoco construir de forma artesanal unos nuevos tiradores desde una pieza de acero inoxidable. Por cierto, la zaga también ve llegar unos nuevos pilotos Full LED, así como el emblema de Packard a una tapa del maletero que también ha variado su diseño.
La compañía neerlandesa no ha desvelado la opción mecánica que utiliza este Packard Excellence, pero aquella maravillosa berlina británica estuvo a la venta con propulsores 4.0 V8 Biturbo (507 o 530 CV), así como con el ilustre 6.0 W12 Biturbo (625 o 635 CV). Independientemente de la elegida, cualquiera de ellos es una opción perfecta para mover con gran soltura semejante criatura, que como te podrás imaginar ha debido costar una buena fortuna a ese desconocido y acaudalado cliente que ha querido rendir un bonito homenaje a una desaparecida marca al crear el Packard que nunca se llegó a materializar.
Fotos: JB Classic & Bespoke






























