Parecía una verdadera locura cuando la firma del óvalo azul lanzaba al mercado su último Ford Fiesta ST, cuyo corazón 1.5 EcoBoost de tres cilindros es capaz de generar 200 CV de potencia (equivale a 66,7 CV por cilindro). Ahora los chicos de Gazoo Racing han ido un paso más allá con el bloque 1.6 Turbo del singular Toyota GR Yaris, pues también con tres cilindros, presume de proporcionar un total de 261 CV de potencia (equivale a 87 CV por cilindro).
Sin embargo la firma sueca Koenigsegg se ha desmarcado con el propulsor utilizado por su primer deportivo de cuatro asientos, el Gemera.
Cada cilindro proporciona 200 caballos
Como ya sabrás, esta joya de la que se van a fabricar tan solo 300 unidades esconde una mecánica híbrida enchufable, en la que se usan tres motores eléctricos y uno de combustión interna. Este último es conocido con las siglas TFG (Tiny Friendly Giant) y resulta ser un impresionante corazón de dos litros, tres cilindros y dos turbos, adaptado para poder funcionar con etanol E85, metanol o gasolina sin plomo, el cual es capaz de proporcionar la friolera de 600 CV y 600 Nm. Y ya hablamos de 200 CV por cada uno de sus cilindros.
Otra particularidad de este bloque capaz de girar a 8.500 rpm es que utiliza el sistema FreeValve de la firma sueca, por lo que no emplea los clásicos árboles de levas, pues estas son movidas por actuadores individuales que inciden sobre ellas, incrementando la polivalencia de este diminuto y poderoso bloque.
Como esto no era suficiente para Koenigsegg, el Gemera añade tres motores eléctricos que añaden al conjunto otros 1.100 CV, de forma que estamos hablando de un deportivo que eroga 1.700 CV y 3.500 Nm en total. No hay que pasar por alto que en sus bajos se han colocado unas baterías de iones de litio y con tecnología de 800 voltios que tienen una capacidad de 16,6 kWh, de forma que le permiten recorrer hasta 50 kilómetros en modo eléctrico (en España conseguiría la etiqueta Cero de la DGT).
