Desde principios de este año, algunos vehículos tienen un motivo para celebrar: ya no tendrán que pasar por el tedioso proceso de la Inspección Técnica de Vehículos (ITV). Esta medida, sin embargo, solo se aplica a aquellos automóviles y ciclomotores matriculados antes del 1 de enero de 1950. La intención detrás de esta nueva normativa es promover y proteger el patrimonio cultural de los vehículos históricos, otorgándoles un estatus especial que los exime de la obligación de pasar la ITV.
La Dirección General de Tráfico (DGT) reconoce la importancia de estos vehículos como parte de nuestra herencia cultural y, por lo tanto, busca aumentar su presencia en las carreteras españolas. La exención de la ITV es una de las ventajas que se les ofrece a los propietarios de estos vehículos históricos, lo que les permite disfrutar de sus coches sin la carga de tener que someterlos a inspecciones regulares.
2Diferencias en los intervalos de la ITV

Para los vehículos ligeros, como los destinados al transporte de mercancías con una masa máxima autorizada inferior a 3.500 kilogramos, los intervalos de inspección varían según la antigüedad del vehículo. Durante los dos primeros años, están exentos de pasar la ITV. Después de estos dos años, la inspección es cada dos años hasta que el vehículo alcanza los seis años de antigüedad. Luego, la ITV se realiza anualmente hasta que el vehículo cumple diez años, momento en el que la inspección se vuelve semestral.
Además, hay una serie de vehículos que están exentos de pasar la ITV durante períodos específicos. Por ejemplo, las motocicletas, cuadriciclos y quads están exentos durante los primeros cuatro años, mientras que los turismos y otros vehículos privados destinados al transporte de personas solo deben pasar la ITV cada cuatro años.