Esta estrategia refleja el compromiso de Francia con la transición hacia una movilidad más limpia y sostenible, en línea con los objetivos medioambientales y de reducción de emisiones del país. Además de fomentar la adopción de vehículos eléctricos, el plan busca democratizar el acceso a esta tecnología, brindando oportunidades equitativas para todos los ciudadanos.
De este modo, Francia se posiciona como un líder en la promoción de soluciones innovadoras para abordar los desafíos de movilidad y medio ambiente en la actualidad.
2Buscando soluciones universales

Para superar estos obstáculos y acelerar la transición eléctrica, algunos gobiernos han puesto en marcha medidas de apoyo e incentivos a la compra de coches eléctricos, como subvenciones, exenciones fiscales, bonificaciones o ventajas de circulación. Estas medidas han contribuido a aumentar la demanda y la oferta de coches eléctricos en algunos mercados, como China, Estados Unidos o Europa, donde se han registrado crecimientos significativos en los últimos años.
Sin embargo, estas medidas no son suficientes para garantizar el acceso universal a la movilidad eléctrica, especialmente para las personas con ingresos bajos o medios, que pueden tener dificultades para adquirir o mantener un coche eléctrico. Por ello, algunos países han explorado otras fórmulas para facilitar el acceso a los coches eléctricos, como el alquiler, el leasing, el carsharing o el ridesharing.