El BMW Serie 1 siempre ha sido un coche disruptivo. A su llegada, en 2004, fue el único compacto que combinaba una carrocería de cinco puertas con tracción trasera y motor longitudinal. Esta configuración se mantuvo en la segunda generación lanzada en 2011 (F20), que realmente era una actualización muy profunda del anterior. A su vez, esta entrega recibió un restyling de cierta importancia en 2015, que se mantendría hasta la llegada del Serie 1 F40 en 2019 que, esta vez sí, supuso un cambio radical.
No en vano, pasó de contar con motor longitudinal y tracción trasera a bloque en posición transversal y tracción delantera. De esta forma, el Serie 1, que hasta entonces sólo había compartido plataforma con el Serie 2 Coupé, pasó a adaptar la misma base que el BMW Serie 2 Active Tourer o el Mini Countryman.
Por el momento ha pocas certezas sobre cómo será el nuevo BMW Serie 1, del que sí sabemos con seguridad que seguirá contando con motores de combustión, que su denominación interna será F70, y que llegará en el segundo semestre de 2024. De esto estamos seguros porque los reporteros lograron fotografiar un documento en el que aparecen algunos datos de uso interno, como que la unidad de pruebas corresponde a un 116i y que su fecha de entrada en producción es julio del 2024.
Desde el punto de vista estético, parece que los cambios serán importantes. Pese al abundante camuflaje, se aprecia una notable diferencia en el frontal, más afilado y con unos faros más estilizados. En el interior habrá un rediseño completo que incluirá muchos de los elementos utilizados en los Serie 2 Active Tourer y X1, como volante, selector del cambio y pantalla central. Es de esperar que gane algo de habitabilidad en las plazas traseras, mientras que el maletero se mantendrá en la actual capacidad (380 litros), que ya es un buen dato.
La electrificación llegará al Serie 1
No obstante, la noticia más reseñable es que el nuevo Serie 1 dispondrá de versiones electrificadas. En esta generación todas las versiones cuentan y han contado con motores de combustión interna tradicionales, lo que le deja en franca desventaja frente a sus principales rivales; en especial, respecto al Audi A3, que además de una versión híbrida enchufable (también presente en el Mercedes Clase A) cuenta con motores con microhibridación.
Para hacernos una idea de lo que puede ser su gama, podemos fijarnos en la del Serie 2 Active Tourer, ya que probablemente será muy parecida. La principal duda es si BMW prescindirá de las cajas de cambio manuales, algo que ya hace Mercedes en el Clase A, pero en el caso de la marca bávara y tratándose de un Serie 1, no creemos que suceda.
En cualquier caso, en el Serie 1 habrá más versiones que en el Serie 2 Active Tourer. No sólo por el 116 que aparece en la documentación (versión que, por cierto, no ha llegado a España en la actual generación), sino por un diésel de acceso a la gama. Sobre los híbridos enchufables, probablemente sólo llegará el de inferior potencia (su nombre será 125e), con 245 CV. La gran duda radica en si, además, habrá una versión 100 % eléctrica como en el X1.
En cuanto a las versiones deportivas, hay buenas noticias. Hemos recibido otro paquete de fotos con una versión que claramente responde a estas características y que probablemente oculte un M135i. No en vano, cuenta con cuatro salidas de escape, una configuración que no habíamos visto en esta generación del Serie 1, ya que tanto el actual M135i como el 128ti cuentan con una salida a cada lado del paragolpes.
Es probable que antes de que termine el año conozcamos más datos oficiales sobre este modelo, pese a que para su entrada en producción aún quedan 10 meses, como mínimo.
