comscore

Elon Musk se ha vuelto loco: Tras Cybertruck y Roadster, su próximo coche eléctrico podría ser anfibio

El CEO de Tesla, Elon Musk, nunca deja de sorprender con sus ideas audaces e innovadoras. Tras el éxito del Model S y el Model 3, y con la llegada del Cybertruck, el empresario sudafricano parece estar pensando en un nuevo vehículo que podría revolucionar el mercado: un modelo anfibio. Pero esta idea no le vino de la nada, sino que tiene una inspiración detrás.

Lesta idea proviene de una película de James Bond de 1977, «La espía que me amó». En la película, el agente 007 conduce un Lotus Esprit que se transforma en un submarino y que fue un avance tecnológico increíble para la época. Musk quedó tan fascinado por este vehículo que incluso lo compró en una subasta en 2013 por casi un millón de dólares.

Era solo un prototipo, pero cautivó a Elon Musk

Era solo un prototipo, pero cautivó a Elon Musk

Si bien el Lotus Esprit anfibio nunca se convirtió en una realidad y era solamente un prototipo que salió en James Bond, Elon Musk ha insinuado que la tecnología para crear un vehículo eléctrico anfibio ya existe. En un tweet, el CEO dijo que «sería genial hacer un Tesla submarino» y parece que hace tiempo está trabajando en secreto para que sea real.

Es aún demasiado pronto para saber cómo sería un Tesla anfibio. Sin embargo, podemos especular que sería un vehículo de alto rendimiento con la capacidad de circular tanto por tierra como por agua. Es probable que esté equipado con motores eléctricos potentes y un sistema de propulsión a base de hélices. La idea era que el Cybertruck tenga esas características, pero no se logró.

¿Por qué es tan difícil crear un coche anfibio?

¿Por qué es tan difícil crear un coche anfibio?

Producir un vehículo eléctrico anfibio no sería una tarea fácil. Los ingenieros de Tesla tendrían que superar varios desafíos, como la impermeabilización del vehículo, el desarrollo de un sistema de propulsión que funcione tanto en tierra como en agua y la creación de un sistema de control que permita una conducción segura en ambos entornos. Son muchos impedimentos para una producción masiva.

A pesar de los desafíos, la idea de Elon Musk es sin duda atractiva. Un coche de este tipo tendría un gran potencial de mercado, ya que podría ser utilizado tanto por personas que disfrutan de los deportes acuáticos como por aquellos que necesitan un vehículo que pueda circular en áreas propensas a inundaciones. La problemática sería la costosa producción y el precio exclusivo que tendría.