La cuenta atrás en España ya ha comenzado. Si tienes un coche con etiqueta B (la de color amarillo), prepárate para no poder circular por muchos lugares de España dentro de unos meses. La Dirección General de Tráfico (DGT) ya ha puesto fecha al endurecimiento de las restricciones y después de los vehículos sin distintivo ambiental, la lógica era que los siguientes fueran los propietarios de la etiqueta B.
Eso sí, ya sabemos que las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) no son comunes en todas las ciudades. Es decir, cada ayuntamiento tiene libertad para prohibir la entrada o limitar el acceso de una manera, dentro del calendario que plantea la DGT. Por tanto, no será igual si tienes un coche con etiqueta B en Madrid, que en Barcelona o Sevilla.
3Qué opciones tienen los conductores de etiqueta B
Si tienes un coche con etiqueta B, seguro que te planteas qué hacer ahora si tu ciudad es una de las más avanzadas de España en materia de restricciones. La primera es evidente, y es renovar tu vehículo por uno con etiqueta C, ECO o Cero (preferiblemente, uno electrificado), pero no todos los bolsillos se lo pueden permitir.
Hay talleres que permiten adaptaciones mecánicas que, en ciertos casos, permiten solicitar a la DGT que vuelva a clasificar el vehículo. Pero también es un proceso costoso, complejo y que no siempre sale rentable.
Otra alterativa es utilizar el transporte público, siempre que sea posible, o al menos combinarlo con el uso del vehículo privado. Por ejemplo, ir con el coche hasta donde las ZBE nos lo permitan y después coger el tren, autobús o metro. Pero uno de los problemas asociados a esto es que los coches con pegatina amarilla han perdido valor de reventa y lo más probable es que esa tendencia continúe a medida que entren en vigor las nuevas normas de la DGT.
