Los chicos de Broad Arrow Auctions se están preparando para una de esas subastas que dejarán huella y en la que buscarán un nuevo hogar a más de 70 automóviles que todos querríamos tener aparcados en nuestro garaje. Entre todos ellos no pasará desapercibido este inmaculado Aston Martin Valkyrie, una maravilla de la ingeniería que fue encargado a la firma británica por nada menos que por el piloto de Fórmula 1, Daniel Ricciardo, quien no escatimó ni un euro a la hora de personalizarlo.
Desde el momento en el que Aston Martin y Red Bull Racing unieron sus caminos para desarrollar uno de los superdeportivos más extraordinarios de la historia, el impresionante Aston Martin Valkyrie se convirtió en una estrella de la que tan solo se han construido 150 unidades de forma totalmente artesanal. Precisamente la última de ellas abandonó la factoría de la firma de Gaydon en diciembre de 2024. Pero si no tuviste oportunidad de hacerte con uno de ellos, ahora los chicos de Broad Arrow Auctions te animan a que te rasques el bolsillo con esta joya que tienes delante de tus ojos.
Ricciardo se enamoró del Aston Martin Valkyrie cuando lo pudo conducir en su fase de desarrollo
Mecánicamente no hay sorpresas, porque como todos los Aston Martin Valkyrie, esta criatura, el chasis #89 de los 150 ensamblados, esconde bajo una liviana carrocería diseñada por el maestro Adrian Newey una impresionante mecánica híbrida donde la voz cantante la lleva un corazón V12 con 6.5 litros y atmosférico firmado por Cosworth y capaz de alcanzar las 11.100 rpm. Junto a esta joya se encuentra una parte electrificada que funciona a modo de KERS y le permite superar de forma holgada la barrera de los 1.000 CV de potencia para así ofrecer unas prestaciones de vértigo.
Para poner a tono el Aston Martin Valkyrie, tanto la compañía británica como Red Bull Racing pusieron a sus mejores pilotos al volante de aquella máquina que nació con el nombre en clave ‘Nebula’, pero que en 2016 vio la luz a modo de prototipo bautizado como AM-RB 001. Entonces el piloto de Red Bull F1, Daniel Ricciardo, tuvo oportunidad de verlo, tocarlo y sentirlo, para enamorarse de aquella criatura hasta el punto de encargar el suyo propio.
Cargado de opciones de personalización firmadas por la exclusiva división ‘Q’
«Se siente como un coche de carreras y parece un coche de carreras», comenta Ricciardo. «No estoy acostumbrado a tener un techo, pero eso es lo único que realmente se siente diferente; por lo demás, es un coche de carreras bastante convencional».
Ricciardo encargó entonces su propio Aston Martin Valkyrie, y no tuvo reparo alguno al acudir al servicio de personalización ‘Q’ by Aston Martin. Ellos fueron quienes aconsejaron al piloto apostar por un color Dichroic Dawn, también conocido como Badger Blue, para vestir la carrocería de fibra de carbono de su superdeportivo. Todo ello teniendo en cuenta que se trataba de una opción de 30.000 libras (34.500 euros). Como opcionales también son la cubierta del motor en carbono lacado, los terminales de color negro para un sistema de escape fabricado en Iconel…
Este Aston Martin Valkyrie podría cambiar de manos por cerca de tres millones
Así hasta llegar también a unas impresionantes llantas de magnesio ultraligeras que Ricciardo decidió acabar en color negro mate y adornar con ese mismo tono Dichroic Dawn que viste la carrocería de su Aston Martin Valkyrie. Por cierto, llantas que sumaban otras 40.000 libras (46.000 euros) a la factura de esta joya en cuyo interior abunda el tejido Alcantara en color Pure Black. Eso sí, sobre ese tejido destacan las costuras y pespuntes plateados, además de la fibra de carbono de sarga 2×2 y satinada. Otra de las muchas opciones de la división ‘Q’ by Aston Martin y culpable de añadir otras 10.000 libras (11.500 euros) a la factura final.
Y es que se dice que Ricciardo gastó la friolera de 141.500 libras (162.755 euros) en diferentes opciones para su Aston Martin Valkyrie, que prácticamente no ha conducido jamás, porque se ha conservado como una de las joyas de su colección personal y acumula apenas 160 kilómetros. De ahí que prácticamente lo puedas volver a estrenar, siempre y cuando estés dispuesto a rascarte el bolsillo. Porque los especialistas de Broad Arrow Auctions aseguran que la joya de Ricciardo cambiará de manos por entre 2,4 y 2,8 millones de euros cuando salga a la subasta que organizan el próximo 10 de octubre durante el Zoute Concours que se celebra en el Approach Golf de Knokke-Heist, Bélgica. Cuantía que está en consonancia con lo pagado por algunos de sus extraordinarios hermanos en diferentes subastas anteriores.
Fotos: Broad Arrow Auctions
