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Conducimos el revitalizado Peugeot 308. Nuevas energías

Fue a finales del año 2013 cuando la firma del león presentó su nuevo Peugeot 308, un exitoso compacto que ha conseguido 34 galardones por todo el mundo, incluyendo el título de 'Coche del Año en Europa 2014'. Con él también se estrenaba la plataforma modular EMP2, un i-Cockpit que asomaba por encima de su pequeño volante o nuevos sistemas de seguridad activa. Unido a un espacioso interior, una completa gama de motores y una estética llamativa, le ha hecho triunfar en el segmento C, que en España supone nada menos que el 46% de las matriculaciones de turismos.

Ahora cuatro años más tarde ha sido el momento de actualizar el Peugeot 308, incluida su práctica versión familiar, denominada SW y que puede presumir de más espacio en las plazas traseras (eso se debe a que su distancia entre ejes pasa de 2.620 a 2.730 milímetros), además de un maletero que crece de 420 a 610 litros de capacidad, más que suficiente para transportar holgadamente el equipaje familiar.

Estéticamente vas a tener que mirarlo dos veces para visualizar lo que cambia, algo que van a agradecer los compradores de la primera 'generación', pues no van a quedar desfasados. Se han rediseñado los faros delanteros, se instalan nuevos antiniebla con tecnología LED (al igual que los proyectores principales, son de serie u opcionales, dependiendo del nivel de equipamiento elegido) y también se revisa el paragolpes frontal. Pocos más cambios encontramos, además de que se ha rediseñado la tapa de carburante para poder acoplar la toma de AdBlue en los BlueHDI, e incluso se estrena La Luz diurna en los pilotos posteriores. Decir que las versiones GT Line y GT cuentan con intermitentes delanteros dinámicos y que aparecen nuevos diseños de llantas.

Si por fuera los cambios se cuentan con los dedos de una mano, por dentro más de lo mismo. Curiosamente no se han animado a instalar el sofisticado i-Cockpit digital que usan los Peugeot 3008 y Peugeot 5008, ni si quiera en los 308 más equipados, por lo que seguimos encontrando los clásicos relojes analógicos, junto a una pantalla central que muestra toda la información. La posición de sus relojes hace que no sea necesario apostar por un Head-Up display como el que utilizan muchos de sus competidores. También se mantiene la pantalla central táctil de 9,7 pulgadas, aunque eso sí, ha sido actualizada. Desde la cual se controla absolutamente todo: radio, climatizador, navegación, teléfono… Y eso en ocasiones es un engorro. Esta pantalla ahora puede sumar un sistema de navegación TomTom con imágenes en 3D y lo último en conectividad gracias al sistema Mirror Screen.

Nuevas mecánicas

El Peugeot 308 siempre ha brillado por un notable comportamiento dinámico, por lo que la firma francesa no ha arriesgado en su puesta a punto. Al igual que sucede en su extensa gama de motores, que abarca propulsores PureTech y THP de entre 110 y 205 CV de potencia en gasolina (más adelante llegarán los Peugeot 308 GTi en la versión más potente de 270 CV), mientras que en diésel encontramos cinco mecánicas BlueHDI con 100, 120, 130, 150 y 180 CV de potencia. Decir que sus ocho mecánicas se ofrecen tanto en los cinco puertas, como en los SW.

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De todos ellos cabe destacar dos importantes incorporaciones a la gama, precisamente los que hemos podido conducir por carreteras entre Alemania y Austria, repletas de curvas y puertos de montaña donde disfrutar al máximo.

Comenzamos hablando del nuevo BlueHDI 130, un nuevo corazón diésel de cuatro cilindros (a diferencia del BlueHDI 120 cuenta con culata multiválvula) y 1,5 litros de cilindrada que ya cumple con la futura norma Euro 6.c de emisiones contaminantes. Hereda tecnología usada por Peugeot en Le Mans y nada más ponerlo en marcha presume de silencio y en los primeros instantes te sorprende su suavidad y agrado. Exclusivamente se asocia a una transmisión manual de 6 velocidades, que cuenta con un tacto y un guiado bastante buenos. Nada te hace pensar en su 'escasa' cilindrada (tiene el mismo par motor que el 1.6 BlueHDI 120: 300 Nm) y se muestra verdaderamente enérgico, estirando sin problemas hasta acariciar las 5.000 rpm. No se conocen sus datos de aceleración (esta versión se comenzará a vender en el mes de septiembre), pero en cuanto a velocidad punta, supera por 10 km/h al de 120 CV. Este nuevo BlueHDI 130 también presenta una gran 'alegría' en la zona baja del cuentavueltas, donde nos obsequia con una ajustado consumo. No se han homologado, pero nosotros registramos un gasto de 6,1 l/100 km, y ya te digo que el ritmo y las carreteras no eran para ir de paseo.

Nueva transmisión de 8 velocidades más ligera

La otra novedad se encuentra por la parte alta, porque tras el verano, el BlueHDI 180 llega equipado exclusivamente junto a una nueva transmisión automática de 8 velocidades. Firmada por el especialista Aisin, reemplaza la anterior de 6 relaciones, que aún mantienen como opción los PureTech 130 y los BlueHDI de 120 y 150 CV. Curiosamente es dos kilos más ligera que la de seis velocidades y ocupa el mismo espacio.

Esta versión está claramente enfocada a aquellos que buscan un compacto con un toque muy dinámico, aunque también se ofrece con carrocería SW. Además de su imagen exterior y su puesta a punto (suspensión, frenos, dirección…) inspirada en la de los 308 GTi, estos BlueHDI 180, que sólo están disponibles con el nivel de equipamiento GT, presumen de prestaciones gracias a que su motor diésel de dos litros es capaz de generar 180 CV y 400 Nm de par motor. Y en realidad corre, con una energía apabullante, que ya quisieran otros deportivos compactos. Estrena un nuevo selector del cambio del tipo By Wire, sin conexión física con la transmisión y tampoco faltan unas levas fijas tras el pequeño volante, que te permiten disfrutar aún más de la conducción. Esta versión cuenta con un Stop&Start que detiene el motor por debajo de 20 km/h y se acompaña de un selector de modos, con los programas Normal, Sport y Eco. Este último ha sido ideado para minimizar el gasto de carburante, pero curiosamente no ofrece la función 'inercia' o 'vela' que si emplean alguno de sus competidores con transmisiones automáticas. Por su parte el Sport está ideado para disfrutar, porque incrementa el sonido por los altavoces, realiza cambios más veloces, endurece la dirección… Este nuevo cambio casa a la perfección con el 2.0 BlueHDI e irá llegando a otras mecánicas. Es suave y muy agradable, pero al circular a 120 km/h e intentar ganar ligeramente velocidad, reduce de marcha instantáneamente, por lo que da sensación de que el cambio siempre va haciendo horas extra. Y esto sucede en otras muchas ocasiones en las que debería hacer trabajar más a los 400 Nm de par de su mecánica.

A nivel mecánico hay que decir que a finales de año llegará una evolución del PureTech 130, que estrena filtro de partículas de gasolina GPF y que será un 4% más eficiente que el actual. Se combinará a su vez con una nueva transmisión manual de 6 velocidades, que es más ligera que la usada ahora y que presenta el mismo tamaño que una de cinco relaciones.

Pero las novedades del Peugeot 308 también tienen en cuenta la seguridad activa, por lo que se ofrecen ayudas a la conducción tales como la frenada de emergencia, avisador de salida de la vía, alerta por fatiga, luces de carretera automáticas, visión trasera 180 grados, sensores de ángulo muerto o regulador de velocidad activo, que en los automáticos, incorpora la función Stop&Go para los atascos.

Incluyendo un descuento de 4.000 euros, el nuevo Peugeot 308 ya lo puedes reservar en los concesionarios de la firma del león desde 15.850 euros, aunque si lo prefieres, aquí te dejamos todos los precios para España.